El testimonio de una fe inquebrantable: Mónica Lacouture ofrece una charla en el Círculo

Mónica es la madre de Christina, una niña tocada por Dios, que tuvo que enfrentarse a a los 6 años a un cáncer. Fundadora de Build the Faith, una fundación sin ánimo de lucro, visita este lunes Córdoba para dar una charla en el Círculo de la Amistad bajo el lema `La cruz, nuestra mayor bendición´. Mónica nació y creció en Colombia. Se mudó a Estados Unidos en 1995, donde ella y su marido Fernando se casaron y tuvieron tres hijos. El menor de ellos, la pequeña Cristina, fue diagnosticada de un cáncer terminal que acabó con su vida a muy temprana edad y cuya fe inquebrantable se convirtió en la inspiración que alimenta la Fundación Build the Faith (Construir la Fe). En una reciente entrevista, Mónica declaraba que «cuando rezamos, la respuesta ha de ser lo que nosotros queremos que pase. Ella (Cristina) nos enseñó algo diferente. Nunca pedía que Dios la sanara, y es una fe que te da fuerza en medio de las adversidades, que te da paz, gozo, que es lo que ella transmitía. Nosotros queríamos que el mundo alrededor nuestro conociera ese Dios, a ese Jesús que ella conocía y transmitía». A lo largo de la batalla librada por Cristina, la fe de Mónica se hizo más profunda, sustentada en la extraordinaria confianza de su hija en Jesús.

Fue así como poco a poco comenzó la gestación de la Fundación. «Yo me iba a dedicar a que las personas cercanas a mí conocieran el amor de Dios, que me agarraba a mí. Una persona nos informó de que en Colombia, en la ciudad de Santa Marta, tenían la necesidad de construir una iglesia y se habían quedado sin recursos. Se lo comenté a Cristina ¿Cómo ayudamos?. Empezamos a hacer rosarios y a venderlos. A ella la seguían 90 mil personas que veían sus vídeos y quisieron ayudar. Y así nació Build the Faith, dedicada a construir iglesias alrededor del mundo». Entre los logros de la fundación presidida por Mónica se encuentra la construcción de la iglesia de Santa Marta (que Cristina pudo llegar a ver antes de fallecer dos meses después), otras tres iglesias, en Nicaragua, El Salvador y Ghana, un convento en Argentina para las Pequeñas Madres de los Pobres, ya que el anterior se derrumbó, y una casa de retiro en México, además de otra iglesia en Camerún.

Esta es la historia de cómo de esta cruz de Cristina se ha generado tanta fe en su familia y que ha germinado en una fundación internacional que construye iglesias en el mundo entero allí donde las comunidades locales no pueden hacerlo por carecer de recursos, vendiendo rosarios, impartiendo charlas y dedicando especial atención al trabajo con jóvenes, aportando su experiencia vital. «Mi hija me enseñó algo muy bonito. Quien tiene a Dios no necesita nada». Si quieren conocer a esta madre extraordinaria y la extraordinaria historia de fe encarnada por su hija Cristina, podrán hacerlo este lunes a las 20,30 en el Círculo de la Amistad.