Manuela Carmena e Íñigo Errejón

Manuela Carmena e Íñigo ErrejónEuropa Press

Auge y caída de Podemos en Madrid: «Tienen una yincana para ver quién es más de izquierdas»

En la actualidad, carece de presencia institucional en la ciudad, sin concejales ni liderazgo visible, con una estructura debilitada y desconectada del electorado

En mayo de 2015, el mapa político de la capital cambió radicalmente. La entonces jueza Manuela Carmena lideró la candidatura de Ahora Madrid, una plataforma ciudadana impulsada por Podemos, Ganemos Madrid, Equo y colectivos sociales surgidos del 15M. Contra todo pronóstico, la formación se convirtió en la segunda fuerza más votada y, con el apoyo del PSOE, logró arrebatarle el Ayuntamiento al Partido Popular tras 24 años de hegemonía ininterrumpida.

La victoria de la izquierda fue un terremoto político. Carmena, con un perfil independiente, logró aglutinar el deseo de cambio de una parte del electorado madrileño. Durante su mandato (2015-2019), se impulsaron políticas de carácter social, medioambiental y participativo.

Se puso en marcha la iniciativa de Madrid Central —la polémica zona de bajas emisiones— y se reforzó la inversión en barrios desfavorecidos. Además, se sugirieron ideas como que los adolescentes recogiesen las colillas de Gran Vía y participasen en limpiezas urbanas.

Lo que desde fuera parecía una gestión estable, por dentro vivía constantes tensiones. Las diferencias entre Carmena y el núcleo duro de Podemos fueron cada vez más notorias y junto a Íñigo Errejón se separaron del partido de izquierdas.

La exalcaldesa, poco dada a las dinámicas de partido, defendía un proyecto más transversal y alejado de la rigidez ideológica. Esa distancia culminó en la ruptura de 2019, cuando Carmena fundó su propia marca, Más Madrid, dejando fuera a buena parte del equipo vinculado a Podemos.

Íñigo Errejón, antes de protagonizar un desayuno informativo en el que ha sido presentado por la exalcaldesa de la capital, Manuela Carmena, en el año 2019

Manuela Carmena e Íñigo Errejón antes de un desayuno informativoEFE

En aquellas elecciones, Más Madrid ganó en votos, pero la división en la izquierda y el auge de Vox facilitaron el regreso del PP al poder. José Luis Martínez-Almeida fue investido alcalde con los votos de Ciudadanos y el partido de Abascal. Para Podemos, fue el principio del fin en el Ayuntamiento. No logró representación y quedó fuera del Consistorio por primera vez.

Desde entonces, el partido político vive sumido en una crisis estructural. Más Madrid mantiene la jefatura de la oposición con Rita Maestre, pero ha perdido fuelle frente al crecimiento del PP, que revalidó su mandato en 2023 con mayoría absoluta.

Podemos, por su parte, carece de presencia institucional en la ciudad, sin concejales ni liderazgo visible, con una estructura debilitada y desconectada del electorado madrileño.

La fragmentación y la descoordinación entre ambas formaciones han impedido una estrategia común frente a un bloque de derecha sólido y en expansión. Mientras el PP impulsa proyectos de movilidad y vivienda, la izquierda no ha conseguido reconstruir una alternativa.

Las tensiones nacionales entre Podemos, Sumar y Más Madrid se han trasladado al ámbito municipal, dificultando cualquier posibilidad de unidad.

Manuela Carmena, exalcaldesa de Madrid

Manuela Carmena, exalcaldesa de MadridDaniel Vara

Carmena crítica con Sumar-Podemos

Por otro lado, la figura de Manuela Carmena sigue presente como referente. La exalcaldesa ha avisado de la dificultad de que vuelva a haber un proyecto único entre Sumar y Podemos «si siguen absolutamente encastrados en etiquetas y casi como una especie de yincana para ver quién es más de izquierdas».

«Yo creo que eso es un mal, a mí me lo parece, con todo respeto. No me parece un buen itinerario», ha recalcado. Sobre si mantendría una candidatura conjunta entre ambas formaciones, ha que es difícil si se empeñan en las citadas «etiquetas».

«Sigo pensando que es muy importante el que haya unas plataformas en las que las etiquetas no cuenten, sino que cuenten unos objetivos muy claros y concretos», ha explicado.

Para ello, considera importante que nombres como el de Pablo Iglesias, Irene Montero y también Yolanda Díaz hicieran «un gran esfuerzo para contar con grandes mayorías desconocidas, que no quieren etiquetas, que no quieren vivir ese 'destrozamiento' personal» y fueran más allá para profundizar en la democracia.

«Yo no he visto que haya habido esfuerzos de ninguna de las formaciones a las que te has referido que estén realmente empeñadas en conseguir este objetivo como un objetivo esencial», ha añadido Carmena, que no volvería a primera línea política si se lo pidieran.

comentarios
tracking