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26 de abril de 2024

Trabajar la zona con ejercicios desde edades tempranas mejora la salud íntima

Trabajar la zona con ejercicios desde edades tempranas mejora la salud íntima

Belleza

Los mejores tratamientos para mejorar y fortalecer el suelo pélvico

Cuando se debilita puede causar ciertos trastornos, siendo el más común la incontinencia urinaria

Son muchas las mujeres que, por diferentes circunstancias, observan cómo el suelo pélvico se debilita y acaba incluso causando ciertos trastornos. Uno de los más comunes, la incontinencia urinaria. A pesar de que tradicionalmente la salud íntima femenina se ha tratado como un tema tabú, cada vez más se visibilizan los problemas que afectan a mujeres de todas las edades.
Según el facultativo Pablo González, la incontinencia urinaria y otros problemas de salud íntima se pueden solucionar gracias al trabajo del suelo pélvico, así como a tratamientos enfocados a mejorar la salud. «Tratar estos casos es de suma importancia y la visibilización se convierte en un aspecto clave para dejar de tratarlo como un tabú y abordarlo con toda la naturalidad». Y añade, «además de personas de mediana edad hay muchas jóvenes que se ven afectadas por afecciones vaginales que les suponen una gran molestia y esto es precisamente lo que se debe evitar para conseguir mejorar su día a día».
En ese sentido, existen ciertos tratamientos cuyos resultados mejoran de forma significativa la salud. Este es el caso de Monalisa Touch, un tratamiento rápido e indoloro para la paciente y sin efectos secundarios.

¿En qué consiste?

A Través del Smartxide Touch de DEKA –que dispone de diferentes tipos de sondas que se adaptan a la anatomía de cada mujer–, la energía láser se aplica a las paredes vaginales de un modo fraccional, es decir, que solamente un pequeño porcentaje del tejido se ve afectado directamente por el láser.
Con esto, se consigue un tratamiento menos molesto e intrusivo en sesiones de corta duración. «Gracias a tratamientos como este, tanto los profesionales como las pacientes mejoran su calidad de vida durante y tras el tratamiento, con resultados realmente notables desde las primeras sesiones», asegura el facultativo Pablo González.

¿Cuántas sesiones se necesitan?

Cabe destacar que desde la primera sesión ya se observan resultados de mejora en la zona tratada. Sin embargo, es necesario someterse a entre 2 y 5 sesiones para lograr los efectos deseados. Concretamente, para pacientes con atrofia común o posparto es suficiente con 2-3 sesiones y para pacientes oncológicos, con 4-5.
En palabras del facultativo, lo ideal es acudir a estas sesiones más o menos cada 5 semanas, por lo que los resultados finales del tratamiento se observan en seis meses, con un porcentaje de efectividad por encima del 80 %.
En este sentido, ¿son necesarios la baja y el reposo? Aunque los tiempos de recuperación se ven reducidos con respecto a una intervención quirúrgica, hay que evitar las relaciones sexuales de tres a cinco días después de la sesión y evitar fricción y humedad por hasta siete días.

Otros tratamientos infalibles

También cabe destacar la eficacia de Dr. Arnold, un tratamiento no invasivo, eficaz e indoloro. «Gracias a su diseño ergonómico, este aparato ofrece la máxima comodidad a la paciente. Y es que, el tratamiento se realiza en un sillón con respaldo y altura regulables y ayuda a tratar la incontinencia urinaria. Para ello utiliza una secuencia única de estimulación magnética y selectiva que interactúa con los tejidos neuromusculares al inducir contracciones musculares intensas y homogéneas sin dolor», declara el facultativo González.
Por otro lado, además de tratamientos para mejorar la salud íntima femenina, es necesario trabajar la zona con ejercicios que fortalezcan el suelo pélvico desde edades tempranas, en torno a los 25 años. Según aconseja González, es importante hacer estos ejercicios sentada o tumbada en el comienzo, pero con el tiempo es posible hacerlos en cualquier posición y lugar, lo que facilita el entrenamiento. Así, simplemente hay que inhalar y, posteriormente, exhalar lentamente, mientras se contraen los músculos del suelo pélvico durante unos cinco segundos.
«No solo el postparto o la menopausia son factores que están relacionados con la debilitación del suelo pélvico; por eso es de suma importancia otorgar el tiempo necesario a estos músculos y cuidar la zona desde edades tempranas», concluye Pablo González, facultativo.
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