El nuevo restaurante de marisco en Alicante: ​del mar a los cielos gastronómicos

JGourmet es la nueva y prometedora apertura de Alicante en el número 8 de la calle Castaños, en pleno centro de esa ciudad bañada por el Mediterráneo en la que el buen tiempo y la alegría son una constante.

Una apuesta por el mar, puro producto para brindar, una marisquería en la que la carta la determinan cada día las aguas salinas. Una cocina en esencia de materia prima, buscando la calidad para engrandecerla con las pequeñas caricias de fuego.

Restaurante con varios espacios de marcada luminosidad, zona de mesas altas y bajas que gira en torno a una barra en la que podremos contemplar los tesoros marinos del día. Deleite para el gusto y también para la vista.

Comienzos entre burbujas con un espumoso del Penedés, de las variedades de macabeo, parellada y xarel-lo. Vendimia manual y crianza de quince meses con levaduras indígenas para conseguir este At Roca reserva de 2022. Colores dorados pálidos y burbuja fina, esencia aromática de flores blancas y notas frescas de pera y manzana con toques cítricos. Paso por boca con pura frescura, notas cremosas y toques de bollería para una acidez refrescante. Prometedor comienzo con quisquillas que ya anuncian la máxima de este restaurante, apuesta por el producto recién salido del mar, de las redes a la mesa en horas brindando pura frescura. Primeros compases que se elevan al cielo con unas espectaculares ostras francesas, magnífica textura y adecuada salinidad, considerable tamaño, en un bocado que nos sumerge en el mar y encumbra un auténtico pase gourmet llevándonos a una espiral de hedonismo culinario.

En JGourmet se mima la concha con maestría, magníficas almejas que se sirven al natural o con ligeros toques de brasa para mantener intacto el producto, tamaño y textura para revestir de elegancia las aguas salinas. Coquinas que se convierten en auténticos caramelos de mar adictivos, elogio a las navajas y a la zamburiñas que sorprenden por su tamaño en una materia prima que seducirá primero a la vista y después de forma apasionada al gusto. Imprescindibles los berberechos, pudiendo escoltarlos con los caracoles de mar.

Salinidad para cerrar los ojos y sumergirnos en los dominios de Poseidón con un excelente erizo de mar, suavidad en la textura y puro sabor a mar al probar los primeros envites. Pases que maridaremos con una G.H. Martel Premier Sur Brut, uva chardonnay y pinot noir que evoca un sutil equilibrio entre la frescura y la vitalidad. Colores amarillos centelleantes, desplegando notas tostadas en nariz, recuerdos de crema de leche y café, sorprendiendo al comensal en boca con notas de miel, almendra ligeramente asada y sutiles besos de vainilla. Estupendo espumoso para continuar disfrutando de la excelente materia prima que día a día se captura en las redes de JGourmet.

Producto fresco

Juegos de ensaladilla rindiendo culto a la cremosidad, bañando la gamba roja y potenciando la sal con las cumbres de anchoa doble cero. Pases frescos y suaves que juegan con la materia prima para brindar sabor y enaltecer un clásico del aperitivo de las barras culinarias. Amalgama de crustáceos con el cangrejo de mar, continuando con unas impresionantes cigalas por dimensión y sabor acompañadas de huevas acariciadas a la plancha. Mención especial merecen los bogavantes que como una constante en JGourmet se orientan a seducir y encandilar a la vista, contemplándolos el comensal vivos como símbolo del producto fresco por antonomasia y preludio de lo que sin duda será una velada de disfrute para los amantes de los mariscos.

Tratándose de las tierras valencianas, no podía faltar la reina de ese mar mediterráneo que baña la costa levantina. Manto imperial para el despliegue de una espectacular gamba roja de Denia destinada al puro disfrute gastronómico. Materia que se sirve a la plancha para disfrutar del cuerpo y la cabeza, excepcional sabor y grandeza de una textura que deriva de la pesca del día.

Gamba roja que podremos acompañar por otros guiños de calidad, los que brindan los langostinos o el gambón. Todos ellos servidos con maestría en un juego de brasas que tiene una máxima, mantener la esencia de un estupendo producto, abrazando la materia con ligeros besos de fuego consiguiendo que no pierda un ápice de calidad. Emblema de una cocina en la que se tiene el arte de no estropear el producto porque cuando la materia prima es sublime sólo hay que mimarla, sin estridencias ni acompañamientos innecesarios. La materia como única bandera.

Pesacado

Del marisco al pescado continuando con un impresionante lenguado sin duda para compartir, espectacular tamaño para servirlo a la plancha. Concierto de virreys, salmonetes y doradas, entre ellos un magnífico calamar para deleitarnos a la plancha. Ríos de Tattinger Brut reserva que nos ofrece expresividad y notas afrutadas en nariz con reminiscencias de albaricoque y ciruela, fragancia de flores blancas y esencial viveza en boca con un final sutil que abre la puerta a una excepcional ijada de atún servida en montadito caliente.

Insuperable culmen en un producto que enamora representando el paso firme de un restaurante que con un precio en torno a sesenta euros por persona, rinde culto al producto para elevarlo del mar a los cielos gastronómicos.