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02 de mayo de 2024

El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, con su mujer Carrie Symonds, en Londres

El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, con su mujer Carrie Symonds, en LondresGTRES

Vacaciones

El refugio de Boris Johnson en la Costa del Sol a razón de 30.000 euros por semana

La exclusiva finca Torre de Tramores, situada en el municipio de Benahavís, pertenece a la familia de su amigo y compañero de gobierno Zac Goldsmith

Boris Johnson no ha podido elegir peor momento para irse de vacaciones. En plena crisis de suministros en Reino Unido, el primer ministro ha volado con su esposa, Carrie Symonds, y su hijo, el pequeño Wilfred, de año y medio, a Málaga para relajarse antes de la llegada del nuevo retoño que espera para finales de año. Seguramente haya sido su forma de resarcirse de la luna de miel que pospusieron por el Covid después de casarse por sorpresa el pasado 29 de mayo, en una ceremonia íntima en la catedral católica de Westminster. Se lo debían como pareja, aunque de cara a la galería, su decisión ha sido muy criticada por la prensa y es más que seguro que le pase factura política.
La Costa del Sol es un lugar frecuentado por políticos ingleses. Antes que Johnson ya disfrutaron de este enclave bañado por el mar Mediterráneo, David Cameron y Tony Blair, entre otros. Seducidos por el sol y los 150 kilómetros de litoral, es perfecto para esta época del año por sus cálidas temperaturas.
Finca Torre de Tramores

Finca Torre de TramoresTramores

Para su estancia, el primer ministro y su familia, se han decantado por la histórica finca Torre de Tramores, situada en el municipio de Benahavís. Se trata de una villa de lujo rodeada por una vasta extensión de 600 hectáreas de bosque, que proporciona la privacidad que todo alto cargo político querría para desconectar con su familia y alejarse de las miradas indiscretas. Como se puede leer en su página web, la finca, que se alquila por 30.000 euros a la semana, se compone de «una extensa e histórica casa de campo española, un anexo para invitados de construcción más reciente y una villa de lujo separada, todo con vistas a un pintoresco paisaje montañoso y valle». Este exclusivo lugar tiene integradas las ruinas de una torre morisca con los arroyos y canales de irrigación originales. Además cuenta con dos piscinas, una pista de tenis, una mesa de billar, una granja orgánica y su propio helipuerto.
Finca Torre de Tramores

Finca Torre de TramoresTramores

Es bien conocida la pasión que tiene el primer ministro por la historia, así que es más que probable que durante su estancia, de duración desconocida, visiten Ronda, a 54 kilómetros del lugar en el que se hospedan. La finca se encuentra además a tan solo 15 minutos de Marbella, muy próximo también a los campos de golf.
El municipio de Benahavís es atractivo de grandes fortunas por las urbanizaciones de alto nivel con las que cuenta, entre las que destacan El Madroñal y La Zagaleta, reconocida como la más lujosa de Europa. También se erige uno de los hoteles más exclusivos de la Costa del Sol, el Villa Padierna Palace, que ha tenido hospedadas a Michelle Obama y Gwyneth Paltrow, entre otras muchas celebridades. 

De los Goldsmith

La finca Torre de Tramores pertenece a la adinerada familia Goldsmith desde que el multimillonario James Goldsmith. Fue el lugar que escogió para pasar sus últimos meses de vida después de que le diagnosticaron un cáncer de páncreas incurable. Allí vivió hasta que falleció el 18 de julio de 1997. Todavía hoy les pertenece y es habitual que tanto la socialité Lady Annabel como los hijos que tuvo el matrimonio, la productora de cine y periodista Jemima Khan, el ambientólogo Ben y el político Zac Goldsmith, pasen largos periodos. Precisamente este último es compañero de partido y amigo, además de miembro del gobierno de Johnson, donde ejerce de secretario de Estado de Medio Ambiente.
Lady Di también escogió este lugar para recuperarse de su divorcio con el príncipe Carlos. Jemima Khan y la princesa eran grandes amigas y terminó convenciéndola para que pasara unos días allí. También lo hizo el actor británico Hugh Grant, aunque en su caso, su estancia no fue del todo agradable. Se habló durante meses de su visita a un local de estriptis de Puerto Banús en un estado de embriaguez.
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