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26 de abril de 2024

La Infanta Cristina y su hija Irene Urdangarin

La Infanta Cristina y su hija Irene UrdangarinGTRES

La vida de Irene Urdangarin en la previa a su mayoría de edad

La hija de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin celebra este domingo su 17 cumpleaños

La familia Urdangarin y Borbón está de celebración ya que este domingo 5 de junio Irene Urdangarin está celebrando su 17 cumpleaños, un día de lo más especial que ha llegado en el que tal vez sea su momento más inestable.
La benjamina del clan ha desempeñado un papel fundamental, aunque en la sombra, tras la separación de sus padres, la cual vino propiciada por la relación extramatrimonial del exduque de Palma con Ainhoa Armentia. Desde el momento en el que vieron la luz las fotografías de su padre paseando de la mano de su compañera de trabajo, la hija de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin se convirtió de manera inmediata en un apoyo fundamental para su madre, de quien apenas se ha separado durante todos estos meses.
Irene y la hija del Rey Juan Carlos viven solas en Ginebra desde hace algún tiempo. La familia se mudó al país suizo a raíz de que Urdangarin se viese ubicado en el punto de mira por su implicación en el denominado caso Nóos, un entramado judicial por el que fue condenado a prisión. Con el exbalonmanista en la cárcel, la Infanta Cristina siguió adelante con su vida rodeada de todos sus hijos, pero lo cierto es que llegó un momento en el que sus tres chicos mayores fueron abandonando el domicilio familiar por motivos profesionales y académicos. Dado que actualmente Juan Valentín vive en Madrid, Pablo en Barcelona y Miguel en Londres, la única que sigue residiendo junto a la hermana del Rey Felipe VI es Irene, que, pese a ser la pequeña de los cuatro hermanos, todo apunta a que ha sido la que más ha consolado a su madre durante todo este proceso y la que, en cierta manera, ha tomado las riendas de su casa.
Irene tuvo una infancia relativamente feliz, pero no se puede decir lo mismo de su madurez. Se vio forzada a iniciar una nueva etapa en Suiza lejos de su padre, del resto de su familia y también de Barcelona, donde pasó sus primeros años de vida.
Irene solo tenía 4 años cuando el caso Nóos saltó por los aires. En ese momento, residía con su familia en el palacete de Pedralbes, pero tuvo que dejar el curso de preescolar que cursaba en el centro Carles Riba para trasladarse con sus padres y sus hermanos a Washington.
Madre e hija, por las calles de Ginebra

Madre e hija, por las calles de GinebraGTRES

La familia volvió a instalarse en Barcelona cuando Irene ya había cumplido los 7 años, pero aquello no duró mucho tiempo. Al ver que seguían estando en boca de todos por los delitos de corrupción que les rodeaban, los exduques de Palma decidieron mudarse a Ginebra tras la imputación oficial de la Infanta Cristina. En ese momento Irene ya había cumplido los 8 años en un día un tanto extraño en el que, por primera vez, no estuvo acompañada de una gran parte de su familia materna.
Desde entonces, la benjamina ha tratado de llevar una vida discreta, normal y alejada por completo del foco mediático, aunque ahora sea de interés para la prensa nacional por las polémicas que atentan contra su familia. Aun así, tal y como reveló la periodista Silvia Taulés en Vanitatis, esto no ha impedido que Irene haya seguido haciendo frente a sus clases en el colegio privado Ecolint, ni disfrutando de su tiempo libre junto a un reducido grupo de amigas con el que parece que hace planes de manera habitual.
Es evidente que ha crecido con muchos privilegios, pero también es cierto que su infancia y su adolescencia distan mucho de una vida idílica. Ahora, Irene suma un año más de vida con el que se sitúa en la antesala de la mayoría de edad, la cual alcanzará el año que viene. Ahora bien, ¿dará un cambio radical a su vida al cumplir los 18 como lo ha hecho su prima, Victoria Federica?
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