
Thibault Courtois y su mujer, Mishel Gerzig, en la imagen que han compartido en redes
Gente
Thibaut Courtois y Mishel Gerzig anuncian que están esperando su primer hijo
La pareja se casó hace seis meses en un idílico entorno de la costa Azul
«Nuestro amor está creciendo. No podemos esperar para conocerte». Con estas palabras anunciaban Thibaut Courtois y su mujer, Mishel Gerzig, que están esperando su primer hijo. La pareja no ha dejado pasar el tiempo y la feliz noticia llega apenas seis meses después de su boda de ensueño en el impresionante Câteau de la Croix des Gardes, en Cannes, a la que acudieron 300 invitados.
En la imagen que acompaña al mensaje podemos ver a la modelo luciendo su incipiente barriga mientras el portero del Atlético de Madrid está agachado besándola. Todo, mientras de fondo podemos observar una bella puesta de sol. De sus palabras también podemos deducir que la joven ha cumplido ya el primer trimestre de gestación, ya que acompaña la publicación con el hashtag #SpringBaby (bebé primaveral).
La pareja disfruta en estos momentos de un descanso tras la grave lesión del futbolista del ligamento cruzado que sufrió el pasado mes de agosto. Desde entonces, se encuentra inmerso en su recuperación con trabajos de fisioterapia a diario, con el objetivo de volver al terreno de juego al máximo.
Cuando nazca, Mishel se convertirá en madre primeriza. No será el caso del guardameta belga, que ya tiene dos hijos de una relación anterior con la canaria Marta Domínguez: Adriana, la mayor, y Nicolás, el benjamín, y con quien comparte su pasión por el fútbol.Su boda de en sueño
El fastuoso Chateaux de la Croix des Gardes fue testigo del enlace de Thibault Courtois y Mishel Gerzig. Construido en 1919 y ubicado en una colina ante las cristalinas aguas de la costa Azul de Cannes, el castillo que apareció en la película de Hitchcock y Grace Kelly Atrapa un ladrón, se convirtió en el entorno ideal para que el portero del Real Madrid contrajese matrimonio con la modelo y militar israelí a la que conoció a través de Instagram durante la pandemia.
Cerca de 300 personas apoyaron al ya matrimonio, entre los que destacan compañeros de equipo del belga como Karim Benzema o Luka Modric. A todos ellos se les instó a que bloqueasen sus agendas los días 25, 26 y 27 de junio para celebrar con ellos su boda de tres días. El domingo 25, durante la fiesta preboda, ya se anticipó que el enlace, previsto para el día siguiente, estaría cargado de romanticismo y momentos especiales.
Los invitados fueron recibidos con una copa de Moët Chandon a su llegada de una botella personalizada con los nombres de los recién casados y esperaron ansiosos la llegada de la novia. Mishel Gerzig eligió caminar hacia el altar donde le esperaba un elegante Courtois vestido de Dolce&Gabanna con un vestido de la firma israelí May Mashiah.
Los novios pusieron el broche a su unión con una ceremonia en la que combinaron sus países de origen. Si Cannes fue el sitio elegido por ser el mejor punto entre Bélgica e Israel para el desplazamiento de amigos y familiares, el enlace no fue para menos y estuvo cargada del simbolismo de ambos al combinar el catolicismo con el judaísmo mediante la concatenación de varios ritos que ha culminado con un ritual de romper con el pie una copa de cristal situada en el suelo.