Irene Montero en el año 2024.
El zasca de Nuria March a Irene Montero por su burla a los «modales de señoritas»
Un simple vídeo sobre cómo sentarse bastó para desencadenar una discusión nacional cuando Irene Montero lo convirtió en ejemplo de opresión
La tarde del 1 de diciembre se animó en redes sociales cuando Irene Montero decidió reaccionar, con notable indignación, a un vídeo en el que dos jóvenes explicaban pautas básicas de modales y compostura al sentarse. A partir de ese momento se abrió un debate inesperado sobre protocolo, postura y feminismo que, solo unas horas después, encontraría una réplica tan irónica como medida por parte de una figura destacada del sector de la comunicación.
Según Montero, enseñar a una mujer a sentarse con corrección equivale a pedirle «que deje sitio a José Luis», que «ocupe menos espacio» y que «se haga pequeñita». En su mensaje afirmaba que, en este tipo de contenidos, lo importante no es la opinión de las mujeres, sino «estar recta en el sofá». Y cerraba su reflexión con una frase que rápidamente se viralizó: «Recordad, chicas: el protocolo para ser una buena mujer es hacerte pequeña para desaparecer».
La reacción de Nuria March
La reacción en redes fue inmediata. Algunos usuarios ironizaron sobre la conveniencia de que un diputado «acredite ciertos conocimientos y, a ser posible, una visita al psiquiatra». Otros lamentaron que convertir los modales en un conflicto ideológico se haya vuelto habitual. Pero la respuesta que concentró mayor atención no procedió de un perfil anónimo, sino de la empresaria y ex mujer de Jaime Martínez Bordiú, Nuria March.
La experta en comunicación publicó un mensaje acompañado de varias fotografías: «Dicen que la manera de sentarse revela el carácter. Siempre crecí escuchando ‘siéntate bien’. Y es verdad que la postura determina tu estado de ánimo. De todas estas fotos… ¿cuál es tu sofá favorito?» Su intervención, breve y calculada, logró rebajar el tono sin renunciar a un punto de ironía.
March inició su trayectoria como modelo en los años ochenta y posteriormente trabajó como estilista, redactora y directora de comunicación antes de fundar su propia agencia. También conduce el pódcast En Marcha con Nuria March, en el que entrevista a figuras como José Toledo, Belén Domecq, Carlos Sainz o Rafa Maza. Su biografía personal, marcada por tres matrimonios y una presencia constante en la prensa social, ha contribuido a convertirla en una voz conocida dentro del ámbito mediático.
En medio del revuelo conviene recordar qué establece realmente el protocolo respecto a la postura al sentarse. Para las mujeres, se recomienda mantener la espalda recta, los hombros relajados y las piernas juntas o ligeramente inclinadas hacia un lado. No se trata de reducir espacio, sino de evitar gestos considerados bruscos en contextos formales. En el caso de los hombres, las pautas no difieren sustancialmente: postura erguida, pies apoyados en el suelo y rodillas juntas o ligeramente separadas. Son normas de cortesía que afectan por igual a ambos géneros.
Irene Montero el 8 de marzo de 2021
La parte más llamativa del debate aparece cuando echamos un vistazo a la hemeroteca. Montero, que tacha estas pautas de «modales de señorita», ha recurrido a ellas en numerosos actos institucionales. En 2021, durante un encuentro con la Reina Letizia y la ministra Reyes Maroto sobre el papel de la mujer en la internacionalización económica, se sentó con las piernas cruzadas y las manos apoyadas sobre ellas, una postura que coincide exactamente con la que ahora cuestiona. Ese mismo año, en un acto del Día de la Mujer, repitió la misma composición corporal.
