Fundado en 1910
Artículo publicado en 1936 en 'Popular Science'

Artículo publicado en 1936 en 'Popular Science'

Picotazos de historia

Kugelpanzer, el tanque esférico alemán que intriga a los expertos desde 1945

Se piensa que haría funciones, por las características que tiene, de observación. La idea más aceptada es que se trataba de un vehículo para un observador de artillería

En Kubinka, una pequeña ciudad perteneciente al óblast de Moscú, situada a unos sesenta kilómetros de la capital rusa, se construyó —en 1978— un museo de tanques que es referencia por las piezas que atesora. Dentro de sus instalaciones podemos encontrar más de 250 tanques emblemáticos de la Primera y Segunda Guerra Mundial y del periodo posterior conocido como Guerra Fría.

Sin duda, la más impresionante joya de los fondos del museo es el mortero autopropulsado, de 60 centímetros de calibre, de la clase Karl. Se construyeron siete (Adam, luego bautizado como Baldur; Eva, luego Wotan; Odín; Thor; Loki; Ziu y Fenrir), diseñados y construidos por la Rheinmetall–Borsig. El que encontramos en el museo es el viejo Baldur, el primero de su clase, de 127 toneladas de peso. Pero el enorme Baldur parece empequeñecer, en lo que a rareza se refiere, frente al modesto y extraño Kugelpanzer que encontramos en el mismo museo.

Y es que este artefacto es un misterio, aumentado por la negativa de las autoridades del museo a dar información técnica o permitir que sea examinado por expertos occidentales.

Según la poca documentación existente, este ejemplar fue capturado a los japoneses durante la campaña de Manchuria de agosto de 1945. Se trata de un vehículo blindado, de forma casi esférica —de ahí su nombre Kugelpanzer o «bola blindada»— que se desplaza sobre tres ruedas en disposición 2x1. Las dos ruedas delanteras son rodillos motrices, de un diámetro de 1,5 metros, que son desplazados por un motor de 25 caballos de potencia. La rueda posterior, mucho más pequeña y conectada con el cuerpo principal por medio de una extensión, aporta estabilidad y ayuda en la maniobra.

La «Bola Blindada», traducción más o menos literal de Kugelpanzer, estaba tripulada por un solo individuo que accedía a su interior por medio de una compuerta situada en la popa o parte posterior del vehículo. Una vez dentro, se sentaba sobre el motor y el depósito y tenía los mandos frente a él.

En la parte delantera había una ranura que haría las veces de mirilla de observación para el tripulante, y debajo de la mirilla una abertura que —se cree, ya que muchas cosas sobre este extraño vehículo son conjetura— serviría de tronera para el cañón de una ametralladora MG 32 alemana o una 96 LMG japonesa. Lo que constituiría la única arma del vehículo.

El Kugelpanzer contaba con un blindaje de cinco milímetros en toda su extensión y tenía un peso que se acercaba a las 1,8 toneladas. Se cree que podía alcanzar una velocidad máxima, en carretera, de 30 km/h y de unos 8 km/h campo a través.

Portada del 'Popular Science'

No hay pistas acerca de su función. Ya les he mencionado que no se ha encontrado documentación alguna en relación con este vehículo. Se piensa que haría funciones, por las características que tiene, de observación. La idea más aceptada es que se trataba de un vehículo para un observador de artillería. Si así fuera, en el interior debería haber una radio para comunicar las coordenadas y las correcciones en el tiro, así como el efecto de las salvas disparadas.

El Kugelpanzer ha sido recientemente restaurado, retornando a su pintura original.

En las últimas décadas, ha surgido una inquietante teoría que ha ido cobrando fuerza. Según esta, el Kugelpanzer que hay en el museo de Kubinka no sería otra cosa más que una enorme broma por parte de los soviéticos.

Esta teoría se sustenta en los siguientes puntos:

A) El vehículo es demasiado lento y quedaría muy fácilmente atascado en un terreno algo abrupto. Desde el primer momento, sería muchísimo mejor y más práctico utilizar los entonces existentes vehículos de observación y reconocimiento Sdkfz 253 (en activo desde 1940; anteriormente hubo otros modelos) o cualquier otro vehículo ligero de reconocimiento. Incluso el Kübelwagen, que era la versión militar del Volkswagen Escarabajo, haría un mejor papel que el Kugelpanzer avanzando campo a través.

B) El blindaje del vehículo es completamente inadecuado para el desempeño de cualquiera de las posibles y probables misiones para las que pudiera estar diseñado.

El Kugelpanzer en el museo de tanques de Kubinka

C) No existe documentación alguna en relación con su diseño, fabricación, montaje, pruebas, uso, envío ni captura. Literalmente, nada de nada.

D) Un último detalle en el que los especialistas alemanes hacen enorme hincapié: el vehículo presenta un tipo de soldaduras muy toscas y de mala calidad, absolutamente contrarias a la mentalidad, meticulosidad y exigencias de calidad y producción que, a lo largo de toda la guerra, mostraron los alemanes. Todo ello parece más propio de los talleres soviéticos de ese tiempo.

¿Idea desquiciada de los ingenieros alemanes o tomadura de pelo de los soviéticos? No se sabe con certeza y no se podrá saber hasta que las autoridades rusas no permitan examinar el vehículo. Hasta entonces, cualquier teoría es válida.