El primer ministro británico Boris Johnson
Canal de la Mancha
Los excesos de Johnson agravan la crisis con Francia, donde el Gobierno le tacha de «mediocre»
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha pedido a su homologo británico que se «ponga serio»
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha pedido a su homologo británico, Boris Johnson, que se «ponga serio» si busca llegar a una solución para la crisis migratoria que desde hace meses contamina el Canal de la Mancha.
Es una petición que surge a raíz de la frívola iniciativa de Johnson de compartir por la red social de Twitter su plan de acción respecto a los inmigrantes, en vez de llevar a cabo diálogos bilaterales con Francia. La situación evidencia una escalada en la crisis diplomática entre ambos países, que presenciaron la muerte de 27 personas durante el cruce del Canal el pasado miércoles.
Boris Johnson «envió» su carta a Macron a través de Twitter. En ella, propone que Francia se lleve de vuelta a los migrantes que ya han cruzado el Canal de la Mancha hacia tierras inglesas. Francia no tardó en tachar la decisión como «inaceptable»:
«Como líderes, no podemos hablar de temas tan serios a través de tweets y cartas que hacemos públicos. No somos denunciantes. Venga ya», lamentó un irritado Macron en una rueda de prensa. «Hablé con el primer ministro Johnson hace dos días muy seriamente. Por mi parte, seguiré haciendo eso, igual que con el resto de los países y líderes. Me sorprende lo poco serios que son sus métodos».
Es como si Johnson se arrepintiese de abandonar Europa, por que tan pronto como tiene un problema considera que es responsabilidad europea resolverlo
En respuesta a la supuesta falta de seriedad inglesa, Francia retiró la invitación de Reino Unido a los diálogos programados para este fin de semana con la Unión Europea, sobre la crisis del Canal. El ministro del Interior francés, Gerald Darmanin, iba a hablar con su homóloga británica Priti Patel, pero ya ha anunciado que cancelará el plan dada la decisión de Johnson.
Darmanin dijo a Patel que la carta era una «decepción», y que «hacerla pública empeoró aún más las cosas».
Falsedad y cobardía
Además, el portavoz oficial del gobierno francés, Gabriel Attal, se sumó a las criticas hacia Johnson por televisión, tachando la carta de «mediocre en cuanto al contenido, y completamente inapropiada en cuanto al método».
«Estamos hartos de la falsedad, y de la cobardía frente a los problemas. Necesitamos que Reino Unido mande a oficiales de inmigración a examinar aquí, en territorio francés, las solicitudes de asilo para Gran Bretaña».
Añadió que el tono de la carta «no reflejaba los intercambios entre Emmanuel Macron y Boris Johnson». «Es como si Johnson se arrepintiese de abandonar Europa, por que tan pronto como tiene un problema considera que es responsabilidad europea el resolverlo. No funciona así. Funciona a través de la cooperación».
«Sentimiento de urgencia»
Cuando los reporteros preguntaron a Boris Johnson si lamentaba enviar y compartir la misiva por redes sociales, su portavoz dijo que «no».
«Como ya ha dicho el propio primer ministro, tanto él como el presidente Macron comparten un sentimiento de urgencia frente a la situación que tenemos entre manos», dijo. «Verán por el tono de la carta que esto va de profundizar nuestra cooperación y añadir al esfuerzo que ya hacemos entre ambos países, el cual Johnson menciona en su carta».
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