El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en la Casa Blanca
Estados Unidos
La victoria demócrata en Alaska, un Estado tradicionalmente republicano, ¿es una buena señal para Biden?
El Partido Republicano controlaba el único escaño de Alaska en la Cámara de representantes desde hace medio siglo
Desde las proximidades del Círculo Polar Ártico ha llegado una bocanada de oxígeno para la campaña demócrata y especialmente para Joe Biden, quien se hunde cada vez más en la impopularidad.
El triunfo de la candidata demócrata, Mary Peltola, frente a la candidata 'trumpista' Sarah Palin, en un bastión republicano como Alaska, reviven las esperanzas en los partidarios de Biden por recuperar la delantera en las elecciones legislativas de este próximo noviembre, pero ¿es verdaderamente una buena señal o un simple espejismo?
La demócrata Mary Peltona fue electa como representante de Alaska en la Cámara de Representantes de EE.UU.
Aunque el triunfo de Peltola resulta sorprendente, tomando en cuenta que los republicanos controlaban el único escaño de Alaska en la Cámara de representantes desde hace medio siglo, el resultado podría explicarse por el nuevo y complejo sistema de votación adoptado en ese Estado.
El peculiar sistema electoral de Alaska
El sistema de votación en Alaska les pide a los votantes que clasifiquen a los candidatos en orden de preferencia. Si ningún candidato obtiene la mayoría, los funcionarios electorales eliminan al candidato en último lugar y redistribuyen los votos de sus partidarios a los demás candidatos restantes, según quiénes quedaron en segundo lugar.
Si de nuevo, ningún candidato logra mayoría, se continúa con el mismo proceso de eliminación hasta que un candidato tenga al menos el 50 % de los votos.
Los republicanos han culpado al sistema de elección por orden de preferencia por la derrota de Palin, pero debido a que los votantes aprobaron el nuevo sistema en una iniciativa de votación de 2020, el mismo sistema estará vigente en el otoño.
Peltola, que estará en el cargo por los dos meses que faltan para terminar el actual mandato, tendrá que enfrentar a los mismos oponentes republicanos, Palin, Nicholas Begich y Tara Sweeney en las elecciones de noviembre para un mandato completo de cuatro años.
Oportunidad para los republicanos
Una encuesta realizada por Alaska Survey Research, que entrevistó a más de 1.400 votantes registrados a finales de julio, encontró que al utilizar el sistema de elección por orden de preferencia, Sweeney, que logró un 7,9 % de apoyo en comparación con los dos dígitos de sus oponentes, sería la primer candidata a ser eliminada de la carrera.
Una vez que se redistribuyan los votos de Sweeney, el próximo candidato a ser eliminado sería Palin. Una ligera ventaja sobre Palin, empujaría a Begich con 29,4 % a la ronda final contra Peltola, quien recibió un 41,9 % de apoyos.
En dos hipotéticas terceras vueltas, si Begich fuera el candidato final frente a Peltola, el republicano ganaría cómodamente con ocho puntos de ventaja. Pero, si los dos candidatos finales terminan siendo Peltola y Palin, la encuesta encontró que Palin sufriría en otoño una derrota aún mayor que la de este verano, perdiendo por un margen de cinco puntos y entregando el escaño históricamente republicano a los demócratas en la Cámara de Representantes.
La contienda a nivel nacional
Aunque la reciente derrota de Palin ha planteado dudas sobre la capacidad de los republicanos para recuperar el control de la Cámara de Representantes, el Partido Republicano sigue siendo el favorito para recuperar la mayoría de congresistas, según el pronóstico Crystal Ball de FiveThirtyEight y el Centro de Política de la Universidad de Virginia (UVA).
La perspectiva es mejor para los demócratas en el Senado, con FiveThirtyEight calificándolos como ligeramente favorecidos para ganar. Esta es una mejora significativa, ya que los republicanos fueron favorecidos previamente, por la misma encuesta para tomar el control del Senado.
Sin embargo, el partido del presidente en ejercicio normalmente se desempeña mal en las elecciones legislativas intermedias y se espera que los demócratas enfrenten unos resultados desfavorables.
Los resultados finales del escaño de Alaska determinarán si esa elección fue una señal de cambio positivo para el partido de Biden.
La perspectiva es mejor para los demócratas en el Senado, con FiveThirtyEight calificándolos como ligeramente favorecidos para ganar. Esta es una mejora significativa, ya que los republicanos fueron favorecidos previamente, por la misma encuesta para tomar el control del Senado.
Sin embargo, el partido del presidente en ejercicio normalmente se desempeña mal en las elecciones legislativas intermedias y se espera que los demócratas enfrenten unos resultados desfavorables.
Los resultados finales del escaño de Alaska determinarán si esa elección fue una señal de cambio positivo para el partido de Biden.
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