El presidente Gabriel Boric y la diputada comunista Karol Cariola
Los comunistas se quedan sin la presidencia del Congreso de Chile por perder el plebiscito
el insistente rechazo de varios partidos políticos y algunos diputados independientes a apoyar la candidatura de la diputada comunista Karol Cariola, llevó al Partido Comunista (PC) a denunciar un «veto» y renunciar a presidir la Cámara de Diputados de Chile.
En un comunicado, los comunistas chilenos señalaron que «no están las condiciones para que un militante o una militante comunista asuma la presidencia de la cámara» y se quejaron de que «se ha impuesto, con diversos argumentos, un veto a nuestro Partido».
«Quienes comprometieron su palabra frente a Chile confirman que no cumplirán», agregó el PC en referencia a la negativa de la Democracia Cristiana (DC) y el Partido de la Gente (PDG) a respaldar a Cariola.
Las bancadas oficialistas, la DC, el Partido Ecologista (PEV), el PDG e independientes suscribieron un pacto de rotación de la presidencia de la Cámara Baja, en el que acordaron dividir en seis períodos de siete y ocho meses los cuatro años que dura la legislatura parlamentaria.
Sin embargo, el resultado del plebiscito del 4 de septiembre, en el que la propuesta de nueva Constitución fue rechazada por una mayoría abrumadora, puso la candidatura comunista en duda por parte de algunos sectores, ya que Cariola ejerció como coordinadora de la campaña del «Apruebo».
«Ante esta situación, como Partido, renunciamos, por ahora, a nuestra legitima opción [de presidir la Cámara] ante el incumplimiento de lo acordado (...) ya que creemos que quienes no son capaces de sostener sus compromisos políticos, difícilmente cumplirán los compromisos con la ciudadanía» se quejó el Partido Comunista.
A partir de ahora se abren las negociaciones para determinar una candidatura que sustituya al actual presidente de la Cámara, Raúl Soto, quien abandonará el cargo el próximo 7 de noviembre.
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