El expresidente Donald Trump y el gobernador de Florida Ron DeSantis en una imagen de archivo
Estados Unidos
Trump se burla de la fuga y despidos de asesores de Ron DeSantis que pierde donantes de campaña
El Partido Republicano se desangra en las luchas internas entre Donald Trump y Ron DeSantis. Los dos aspirantes a ganar las primarias están virtualmente con el cuchillo entre los dientes. El primero arrasa en los sondeos y se burla de su compañero de filas y el gobernador de Florida pierde el poco fuelle que tenía y a una docena de asistentes de su campaña.
El barco de DeSantis hace aguas antes de haber zarpado. El republicano va 40 puntos por debajo de Trump y los suyos o le dan la espalda o los despide. Esto último es lo que ha pasado con parte de su equipo de campaña. Según The Times habría echado a doce colaboradores de rango medio después de que otra tanda de miembros de su equipo, entre estos asesores principales, se despidieran voluntariamente de su campaña.
Cuando se cumplen un par de meses desde que DeSantis lanzara oficialmente su campaña, los problemas se le multiplican al republicano que un día fue una de las principales espadas para defender al expresidente.
Corre desesperadamente por una causa perdidaDonald Trump sobre DeSantis
Su desplome en las encuestas para las primarias de principios de 2024 ha servido en la bandeja del escarnio la inquina que le tiene Trump. «Corre desesperadamente por una causa perdida», clamó en uno de sus mitines Trump. «No se por qué no está aquí. Debería estar aquí representándose a sí mismo», ironizó en la Conferencia de Acción Turning Point de Florida a la que acudieron otros candidatos, pero no el gobernador de ese estado.
El exceso de confianza del gobernador le llevó a contratar a 92 personas
A pesar de las causas judiciales que le pisan los talones y le complican la vida, Trump sigue viento en popa a toda vela en la carrera por las primarias. La retirada a mitad de carrera de importantes asesores de DeSantis se interpreta como un abandono ante una derrota que ahora intuyen inevitable. El despido de los otros se atribuye a que el exceso de confianza del gobernador le llevó a contratar a 92 personas, un número descomunal al que no se acerca ningún otro candidato .
Estámpida de donantes de campaña
Detrás de esa decisión estaría la fuga en paralelo de donantes que se habían pasado a las filas de Trump o a otros candidatos. «Está cayendo tan rápido que probablemente pierda el segundo puesto muy pronto», pronóstico un Trump eufórico que ve en recuperar la Presidencia la única puerta de salida a sus problemas judiciales.
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