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01 de mayo de 2024

El interior de una bomba de racimo contiene centenares bombas que se dispersan para mayor alcance

Interior de una bomba de racimo

Guerra en Ucrania

Ucrania bombardea una aldea rusa con municiones de racimo, bombas prohibidas en más de 100 países

Estados Unidos proporcionó el pasado julio municiones de racimo a Ucrania, que se comprometió a utilizarlas solamente para desocupar concentraciones del Ejército enemigo

Las fuerzas armadas ucranianas han bombardeado durante esta madrugada el asentamiento ruso de Klimovo –cercano a la frontera de Ucrania– y ha dañado varias casas residenciales y dependencias, según ha reportado en su perfil de Telegram el gobernador de la región, Alexander Bogomaz.
Según el mandatario local, los militares ucranianos utilizaron en este ataque municiones de racimo, armas que constan de un contenedor que se abre en el aire y dispersa grandes cantidades de submuniciones explosivas o «bombetas» sobre un área amplia.
Estas bombas suponen un grave peligro para la sociedad civil, debido a que, diseñadas para estallar al impactar, liberan grandes cantidades de submuniciones de forma indiscriminada, por lo que pueden ser mortales en zonas muy amplias.
Estados Unidos proporcionó el pasado julio municiones de racimo a Ucrania, que se comprometió a utilizarlas solamente para desocupar concentraciones del Ejército enemigo. Esta medida fue criticada por varios países de Europa, entre los que se incluye España. Las municiones de racimo están prohibidas en más de 100 países del mundo debido a su peligrosidad, sin embargo, Rusia, Ucrania y Estados Unidos siguen permitiendo su uso.

Peligro de las municiones de racimo

Según el informe Cluster Munition Monitor de 2023, se han registrado más de mil víctimas de las municiones de racimo desde el inicio de la guerra en Ucrania. Solo en el país invadido, estas bombas asesinaron o hirieron a 916 personas. Al bombardear las diferentes zonas de forma indiscriminada, la mayoría de las víctimas eran civiles, incluidos niños.
Uno de los grandes problemas que causan este tipo de bombas es el gran número de submuniciones que no llega a estallar con el impacto. Se estima que el índice de error de estas armas en conflictos recientes varía entre el 10 % y el 40 %. El empleo de estas armas a gran escala ha infestado algunos países y regiones de decenas de miles de submuniciones sin estallar sumamente inestables.
Estas «bombetas» que no estallan con el impacto suelen explotar cuando son manipuladas o se mueven, poniendo en riesgo a la población civil. Además, se trata de armas que, por norma general, son de caída libre, es decir, que no están dirigidas a un objetivo concreto. Es por esto que las condiciones climáticas y otros factores pueden incidir en su exactitud, de modo que pueden caer en zonas distintas del objetivo militar que se pretendía atacar.

Noche de ataques en Ucrania

Ucrania, por su parte, no se ha pronunciado sobre la afirmación del gobernador de Klimovo, pero ha comunicado que durante la madrugada de hoy la fuerza aérea ucraniana destruyó 29 drones y un misil lanzados por Rusia durante una nueva serie de ataques nocturnos contra la antigua república soviética.
La defensa aérea ucraniana «destruyó treinta objetivos aéreos en el sur y el este» –29 drones Shahed 131/136 de fabricación iraní y un misil de crucero Iskander-K–, según comunicaron las fuerzas armadas en la plataforma Telegram.
En total, Rusia lanzó 31 drones y un misil desde la península de Crimea, anexionada por Moscú en 2014, añade el texto.
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