Isla Bryson, mujer trans encarcelada que cumple su condena en una prisión de hombres
Reino Unido
Una mujer transgénero, acusada de violar a una niña de 13 años y agredir sexualmente a un niño
Los casos de presos trans son analizados individualmente en función del riesgo y teniendo en cuenta la seguridad de los internos
Maddison Wilson compareció este miércoles en el Tribunal de Southampton (sur de Inglaterra) en una audiencia de tan solo cinco minutos para confirmar los pronombres con los que le gusta que se dirijan a su persona. La mujer transgénero, de 37 años, está acusada de violación y agresión sexual contra dos niños. Los hechos se produjeron hace ya 14 años.
Aunque el tribunal considera a Maddison Wilson una mujer, el pliego de cargos recoge que habría abusado en 2011 de una niña «con su pene». Seis años después, se habría propasado con un niño de 13 años.
Maddison Wilson volverá a comparecer ante el tribunal dentro de quince días para hacer frente a los presuntos delitos sexuales de los que se le acusa.
En el caso de que Wilson resultase culpable, surge una segunda cuestión que sería si la condena debe cumplirse en una prisión de mujeres o de hombres. La ley en Reino Unido es clara en este aspecto y recoge que «las mujeres transgénero que han sido condenadas por delitos sexuales o violentos o que conservan genitales masculinos no pueden ser recluidas en una prisión de mujeres a menos que se den circunstancias verdaderamente excepcionales».
Karen White, en una imagen de archivo
Sin embargo, hasta dentro de la comunidad trans hay discrepancias. Karen White, una mujer transgénero que agredió sexualmente a dos reclusas en una prisión femenina, opina que las presas transgénero no deberían estar en las cárceles de mujeres.
White, que se identificó como mujer, pero no se sometió a cirugía ni tratamiento hormonal, fue encarcelada después de admitir agresiones sexuales a otras reclusas, así como dos violaciones anteriores.
Cuando la pusieron en prisión preventiva en 2017, White advirtió a los funcionarios que no la encarcelaran en una prisión de mujeres, pero el magistrado decidió lo contrario, ya que llevaba viviendo como mujer en «la comunidad» desde hacía dos años. Ahora, White está en Frankland, una prisión masculina en el condado de Durham.
