
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, en Moscú
El Kremlin confirma una reunión este martes en Riad entre Rusia y Estados Unidos
El Kremlin confirmó este lunes una reunión para el martes entre representantes de Rusia y Estados Unidos en la capital de Arabia Saudí, Riad, para abordar la normalización de las relaciones bilaterales, los preparativos para una cumbre entre los presidentes de ambos países y unas futuras negociaciones de paz sobre Ucrania.
Por orden del presidente, Vladimir Putin, Rusia estará representada por el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, y el asesor del Kremlin, Yuri Ushakov, quienes ya partieron hacia Riad, explicó Dmitri Peskov, portavoz presidencial, en su rueda de prensa telefónica diaria.
«Se espera que celebren una reunión con sus homólogos estadounidenses en Riad el martes, que estará dedicada principalmente a restablecer todo el complejo de las relaciones ruso-estadounidenses», señaló el portavoz del Kremlin.
Asimismo, Peskov añadió que el encuentro también estará dedicado «a la preparación de las posibles negociaciones para el arreglo en Ucrania y la organización de la reunión» entre Putin y su colega estadounidense, Donald Trump.
El portavoz del Kremlin destacó que a día de hoy en el mundo «todos ahora intentan hablar de lo que hay que hacer para parar, sea como sea, la guerra». «Esto es algo positivo», señaló.
En el caso de Estados Unidos, su equipo está formado por el secretario de Estado, Marco Rubio, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Mike Waltz, y el enviado para Oriente Medio, Steve Witkoff.
Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, inició una gira por el Golfo Pérsico, que también le llevará a Arabia Saudí, donde ya se encuentra su ministra de Economía ucraniana, Yulia Sviridenko. Zelenski aterrizó en Emiratos Árabes Unidos (EAU) en la noche de este domingo para abordar un «gran programa humanitario».
Trump anunció el pasado miércoles tras conversar por teléfono con Putin un acuerdo para el inicio de negociaciones de paz en Ucrania sin Europa, lo que indignó a Bruselas y Kiev, que ha dicho que no aceptarán un arreglo a sus espaldas.