El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó que Israel e Irán han alcanzado un pacto para un alto el fuego
El Senado de EE.UU. frena el intento demócrata de restringir la capacidad militar de Trump frente a Irán
El oficialismo republicano bloquea una propuesta para exigir autorización del Congreso antes de nuevas acciones militares, en medio de la creciente tensión con Teherán
Trump confía en que habrá un alto el fuego en Gaza en la próxima semana
El Senado de los Estados Unidos rechazó este viernes una iniciativa presentada por el legislador demócrata Tim Kaine que pretendía limitar las atribuciones del presidente Donald Trump en materia de operaciones militares contra Irán, sin previa autorización legislativa.
La propuesta, fundamentada en la Ley de Poderes de Guerra, fue desestimada tras una votación que terminó con 53 votos en contra y 47 a favor, reflejando el actual clima de fuerte división partidista que caracteriza al Congreso estadounidense.
El senador Kaine defendió la necesidad de reforzar los mecanismos de control del poder Ejecutivo, subrayando que el presidente no debe actuar unilateralmente en asuntos tan sensibles como los conflictos armados. Sin embargo, las posibilidades de que su iniciativa prosperara eran escasas, considerando que la Cámara Alta permanece bajo mayoría republicana, cuyos miembros respaldaron en bloque al presidente Trump.
El debate se produce en un contexto de alta tensión internacional, luego de que, hace una semana, el Gobierno estadounidense ordenara ataques dirigidos contra las instalaciones nucleares iraníes de Fordó, Isfahán y Natanz, sin consulta previa al Congreso. Estas acciones, que según el propio Trump fueron «un éxito contundente», habrían contribuido a frenar la escalada de violencia entre Irán e Israel, culminando en un acuerdo de alto el fuego tras casi dos semanas de enfrentamientos.
Un simpatizante de Hezbolá porta una imagen del líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, durante una protesta
Durante una comparecencia pública esta mañana, el mandatario estadounidense advirtió que no dudaría en autorizar nuevos ataques si los servicios de inteligencia detectan indicios de que Irán está enriqueciendo uranio a niveles que puedan suponer una amenaza. Trump reivindicó las recientes operaciones como una demostración de fuerza y eficacia, mientras remarcaba su compromiso con la seguridad de sus aliados en la región.
Por su parte, el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, desestimó las declaraciones de Washington y calificó los ataques como «infructuosos», asegurando que Irán no ha cedido en su política nuclear y que los objetivos estadounidenses «no lograron alterar los avances técnicos» del programa iraní.
La discusión sobre los límites del poder presidencial en materia bélica sigue abierta en el seno del Congreso, mientras la situación en Oriente Medio continúa siendo motivo de preocupación para la comunidad internacional.
