Trump pone fin al amparo migratorio para venezolanos y abre una nueva batalla legal en Estados Unidos
Trump pone fin al amparo migratorio para venezolanos y abre una nueva batalla legal en Estados Unidos
La revocación del Estatus de Protección Temporal (TPS) deja en el limbo a cerca de 600.000 inmigrantes, mientras los tribunales federales analizan los efectos de la medida
El Gobierno de Donald Trump ha anunciado este miércoles la cancelación del Estatus de Protección Temporal (TPS) que había sido otorgado a los venezolanos en 2021 bajo la administración de Joe Biden. La medida, oficializada por la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, afecta directamente a unos 250.000 inmigrantes de Venezuela que perderán su permiso de trabajo y quedarán expuestos a la deportación a partir del 10 de septiembre.
El TPS, un mecanismo humanitario creado para proteger a ciudadanos de países golpeados por conflictos armados, desastres naturales o crisis extraordinarias, había sido renovado en 2023, lo que amplió la cobertura a otros 350.000 venezolanos. En total, cerca de 600.000 personas se beneficiaban de esta protección en Estados Unidos.
Según el portavoz del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS), Matthew Tragesser, la decisión de no extender el amparo responde a que el TPS «funciona como un imán migratorio» y dificulta los esfuerzos del Gobierno Trump para controlar la frontera sur. «Mantener esta medida socava directamente la capacidad de gestionar los flujos migratorios de manera eficaz», señaló.
El argumento central de la Casa Blanca es que las condiciones en Venezuela ya no cumplen con los criterios legales para mantener el programa. Sin embargo, organizaciones de defensa de los inmigrantes cuestionan esta visión, recordando que el país continúa atravesando una crisis política, económica y humanitaria sin precedentes en América Latina, con millones de personas desplazadas en la última década.
Manifestación frente a la Casa Blanca en Washington, a favor el Estatus de Protección Temporal
La decisión se produce en paralelo a una intensa disputa judicial. El Tribunal del Noveno Circuito de Apelaciones ratificó recientemente el fallo del juez Edward Chen, del Distrito Norte de California, quien había considerado ilegal la terminación del TPS para los venezolanos. La demanda fue presentada por la Alianza Nacional TPS y un grupo de inmigrantes respaldados por la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), que advierten de las graves consecuencias humanas de la medida: pérdida de empleos, separación de familias, detenciones y deportaciones masivas.
El futuro inmediato de los beneficiarios depende ahora de una resolución judicial que el juez Chen deberá emitir en los próximos días. Esa decisión podría suspender temporalmente la aplicación de la orden de Trump y brindar un respiro a los afectados. Mientras tanto, miles de familias venezolanas en EE.UU. permanecen en la incertidumbre, enfrentando un dilema que trasciende lo legal y pone en juego su estabilidad económica, su arraigo social y la posibilidad de seguir construyendo un futuro en el país que eligieron como refugio.