El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro
Venezuela anuncia el cierre de sus embajadas en Noruega y Australia y anuncia nuevas sedes en África
El anuncio del cierre y apertura de sedes diplomáticas se produce en medio del nuevo episodio de tensiones que viven desde agosto Caracas y Washington tras el despliegue militar estadounidense en aguas del mar Caribe
El régimen de Venezuela anunció este lunes el cierre de sus embajadas en Noruega y Australia y la apertura de nuevas sedes diplomáticas en Zimbabue y Burkina Faso, una decisión que tomó para «fortalecer las alianzas con el sur global» y como parte de una «reasignación estratégica de recursos».
El Ejecutivo de Nicolás Maduro detalló en un comunicado que las relaciones bilaterales y la atención consular a la comunidad venezolana en Noruega y Australia serán llevadas a cabo a través de «misiones diplomáticas concurrentes, cuyos detalles se anunciarán en los próximos días».
«Venezuela ratifica que estas acciones reflejan su voluntad inquebrantable de defender la soberanía nacional y contribuir activamente a la construcción de un nuevo orden mundial, basado en la justicia, la solidaridad y la inclusión», manifestó el régimen chavista.
Sobre la alianza con Zimbabue y Burkina Faso, indicó que se «procederá a la apertura» de nuevas embajadas de Venezuela en estos países para reforzar «los lazos históricos con el continente africano» y establecer «misiones diplomáticas residentes en dos naciones hermanas, socios estratégicos en la lucha anticolonial y la resistencia frente a presiones hegemónicas».
«Estas embajadas servirán como plataformas clave para impulsar proyectos de cooperación en agricultura, energía, educación, minería y otras áreas de interés común», precisó.
Tras las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024, cuya victoria se otorgó el autócrata Maduro, Venezuela rompió relaciones, en un solo día, con Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay, cuyos gobiernos rechazaron el proclamado triunfo del líder chavista, lo que llevó a la suspensión inmediata de contactos diplomáticos.
El anuncio del cierre y apertura de sedes diplomáticas se produce en medio del nuevo episodio de tensiones que viven desde agosto Caracas y Washington tras el despliegue militar estadounidense en aguas del mar Caribe cercanas a Venezuela.
El Gobierno de Washington defiende ese despliegue como una operación contra el narcotráfico procedente de la nación suramericana, mientras que el régimen de Maduro insiste en que se trata de una «amenaza» para propiciar un «cambio de régimen».