Las diferencias morfológicas son clave a la hora de analizar las estadísticas de fallecidos
Seguridad vial
Por qué las mujeres tienen más posibilidades de morir en un accidente de tráfico que los hombres
Entre otras razones, los sistemas de seguridad de los automóviles actuales protegen más y mejor a los hombres que a las mujeres
Las estadísticas no dejan lugar a error, en los últimos 60 años las mujeres muestran un riesgo mucho mayor que los hombres de sufrir daños graves e incluso de fallecer en un accidente de tráfico.
De acuerdo con datos del NHTSA (organismo estatal encargado de velar por la seguridad vial en EEUU), hablamos de que las mujeres tienen un 73 % más de riesgo de sufrir lesiones graves, y de un 17 % más de posibilidades de fallecer. Se trata de estudios realizados siempre en valor relativo, pues lógicamente la tasa de hombres que mueren en carretera es mayor porque el número de hombres al volante es mayor que el de mujeres.
Las estadísticas son muy claras
Los datos se refieren siempre a lesiones sobre el conductor y haciendo uso siempre del cinturón de seguridad.
Habría que retroceder a los años 80 cuando las primeras estadísticas reflejaban ya que las mujeres tenían hasta un 21 % más de posibilidades de fallecer en accidente de tráfico. Esta cifra se ha ido reduciendo con los años de forma importante, pero aún a día de hoy la diferencia es muy abultada.
Los dummies se adaptan a diferentes tallas, pero no a las formas femeninas
En conjunto, se cuantifica que a día de hoy las mujeres son un 37 % más vulnerables que los hombres en accidentes de tráfico. Se especifica además una serie de lesiones que son especialmente habituales en las mujeres.
Lesiones más habituales en mujeres
- Cabeza
- Pecho
- Abdomen
- Cuello
- Brazo
- Pierna
Janson Hallman, del departamento de Seguridad de Toyota y colaboradora del Medical College of Wisconsin, hace referencia en sus estudios a las diferencias biomecánicas entre el hombre y la mujer.
Obviamente existen diferencias obvias como son el peso y la talla y otras no tan obvias que pueden estar detrás de esta realidad. Las diferencias de morfología saltan a la vista y no cabe la menor duda de que tienen influencia sobre las consecuencias de los accidentes de tráfico.
Posibles explicaciones
Las explicaciones son numerosas. Desde las más simples que hablan de que los hombres suelen conducir automóviles más grandes tipo SUV y similar que les protegen mejor en caso de accidente, hasta algunos estudios mucho más profundos que habla de un problema de adaptación de los dummies.
Los dummies de crashtest se pusieron en funcionamiento en los años 50. En aquel momento reflejaban ya fielmente el cuerpo de un hombre, tanto en talla como en altura. Y esa tendencia se ha mantenido con el paso de los años.
Actualmente, los dummies más sofisticados incluyen hasta 100 sensores a lo largo del muñeco para analizar las causas y consecuencias de las lesiones. Pero, como indican desde el centro USA Humanetics de Detroit, especialista en dummies, aún son insuficientes para reflejar las diferencias obvias que existen entre el hombre y la mujer.
Una de las zonas más delicadas es el pecho, las lesiones en este caso son mucho más severas en las mujeres en golpes muy suaves, consecuencia lógica de su anatomía y de unos cinturones que no están pensados para el diferente tipo de sujeción que necesita el cuerpo femenino.
Peso, talla y morfología cambian por completo entre hombres y mujer
Los dummies de hoy en día siguen basándose sobre siluetas de 1,75 metros de alto y 60 kilos de peso, el maniquí es sólo representativo del 5 % de las mujeres adultas. Sin tener en cuenta también peculiaridades como la forma de su columna vertebral, diferente a la del hombre.
'Dummies' femeninos
Se habla ya de una nueva generación de dummies con hasta 250 sensores que simulan a la perfección formas como el pecho de la mujer. Con su utilización inmediata, se espera reducir esta diferencia en los datos de fallecimientos, pero aún queda mucho por hacer en materia de adaptación de los diferentes sistemas de seguridad.
Pese a que el avance en materia de seguridad en las últimas décadas ha sido impresionante, con multitud de medidas de innovaciones activas y pasivas como los cinturones de tres puntos, los airbags… No se han hecho estudios específicos a la anatomía femenina para mejorar la adaptación de este tipo de avances a su morfología.
La clave, coches más seguros
Lo cierto es que la única realidad que arrojan todos los estudios es que cuanto más seguro sea el coche menor es el índice de lesiones que sufre tanto el hombre como la mujer, por lo cual las cifras de Euroncap siguen siendo válidas. Si bien a medio plazo se deberían establecer diferencias entre la calificación para hombres y mujeres.
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