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La plaza que ocupamos dentro de un coche importa mucho más de lo que parece

Seguridad vial

La razón por la que los niños y los mayores deberían sentarse siempre en este asiento del coche

Un reciente estudio norteamericano identifica que las consecuencias de un accidente sobre los ocupantes pueden variar en función de dónde van sentados

Ni siquiera los mejores expertos del mundo en seguridad vial saben responder con seguridad a la pregunta de cuál es el asiento más seguro de un coche.
Es cierto que casi todos se ponen de acuerdo a la hora de señalar a la butaca del copiloto como la más insegura, pero nadie es capaz de decantarse por la más segura.

Mayor seguridad

Entre otras cosas, los estudios que se han realizado en numerosas ocasiones se ciñen a accidentes reales, no valen los crash test preparados, en los que los vehículos no llevan todas sus plazas ocupadas, por lo cual la metodología no ayuda.
Da igual que el vehículo sea de cinco o de siete plazas

Da igual que el vehículo sea de cinco o de siete plazas

El instituto de seguridad norteamericano IIHS, equivalente a Euroncap europeo, ha hecho público un estudio muy revelador en el que se explica cuál es la plaza más segura de un coche.

Estudio sobre el terreno

En el mismo y tomando como base 117 accidentes con todas las plazas ocupadas, la butaca central trasera se ha mostrado siempre como la más segura para los ocupantes. En este caso las posibilidades de supervivencia son hasta un 17 % superiores.
Así, el resultado ha sido tan concluyente que la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico de las Carreteras en los Estados Unidos (NHTSA) ha recomendado que los niños pequeños viajen siempre en ese puesto en su sillita de retención.
Tradicionalmente se hablaba de la plaza detrás del copiloto como la más segura

Tradicionalmente, se hablaba de la plaza detrás del copiloto como la más segura

Parece que se trata del lugar más protegido frente a cualquier tipo de accidente al estar en el centro del coche, además la ausencia de airbags también mejoraría la protección, pues el cuerpo tendría más libertad de movimientos y no sería frenado brutalmente por nada tras el impacto. Conviene recordar que la deceleración provoca daños internos en los cuerpos que en muchos casos son los responsables de las muertes.

Niños y mayores: detrás

Esta explicación es igualmente válida para las personas mayores. De acuerdo con recientes estudios, el porcentaje de fallecidos mayores de 65 años por accidente de tráfico es superior a la media porque son más vulnerables, pues suelen presentar otro tipo de patologías que se agravan en estas circunstancias.
Por ello, la conclusión es sencilla: tanto los mayores como los niños deberían ir siempre sentados en la plaza central trasera.
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