Un camión de Defender de la Junta de Castilla y León camino de un desguace
Desguaces
El negociazo de comprar coches públicos a precio de chatarra y venderlos a precio de oro
Hace años que se investiga una operación de estas características por prevaricación, pues el comprador pagó 220.000 euros por unos 'coches viejos' con un valor real de mercado superior a los 2,7 millones de euros
Tal y como es conocido tanto el Estado como diferentes instituciones públicas disponen habitualmente de un parque móvil para uso propio.
En algunas ocasiones se trata de simples coches de representación, como los que usa Pedro Sánchez, mientras que en otras se trata de vehículos que son necesarios para que funcionarios públicos puedan llevar a cabo su cometido. Por ejemplo los todoterreno de las consejerías de Medio Ambiente.
Coches de trabajo
Una vez pasado el tiempo lógico de uso, algo que normalmente está referenciado en tablas de amortización, el Estado o la administración competente se deshace de los vehículos. Lógicamente para deshacerse de los vehículos debería sacarlos a subasta pública, habitualmente disponible en el BOE, y a la que cualquiera puede acceder.
Uno de los Land Rover de la Junta de Castilla y León que apareció a la venta
Pero como en todo hay excepciones. Normalmente los coches que enajena cualquier institución pública tienen valores relativamente bajos, pues son vehículos que deben haber sido exprimidos hasta la última gota en su labor, aunque hay algunos coches muy especiales que no sólo no tienen un valor bajo sino que están muy cotizados en el mercado de segundamano.
Carne de desguace
Es habitual que algún desguace puje por estos coches y se los quede para achatarrarlos y vender las piezas, lo que no es tan habitual es que un desguace los compre por decenas y los adecente para su posterior comercialización.
Anuncio real publicado en su día en páginas especializadas
Tal y como ocurrió hace unos años en Valladolid, donde un conocido desguace se dedicaba a comprar los Land Rover Defender de la Junta de Castilla y León por un precio medio que rondaba los 700 euros para revenderlos posteriormente por hasta 13.000 euros, tal y como pudo leerse en la prensa en 2020, un caso que se encuentra aún pendiente de sentencia por lo que podría ser un delito de prevaricación y malversación de fondos públicos.
Vuelta al mercado
En este caso lo razonable es que la administración hubiera sacado los vehículos a la venta de uno en uno por subasta pública, pero se vendieron por lotes, hasta 313 todoterrenos por los que la Junta recibió 220.000 euros por unos coches con un valor real de mercado superior a los 2,7 millones de euros.
El camión de desguace cargado de vehículos de la Junta
Cualquiera que sepa un poco de automóviles conoce el valor real de vehículos como los Land Rover Defender, muy cotizados en el mercado de segunda mano, vehículos escasos y extremadamente buscados por fincas de caza, coleccionistas y en los Estados Unidos, donde pagan barbaridades por ellos.
En primera persona
Hace sólo unos días descubrimos un camión cargado de vehículos de estas características camino de un desguace, en teoría estos coches deberían ser dados de baja y achatarrados allí, pero la ley permite que puedan volver a ponerse en circulación... A falta de conocer los detalles económicos de la operación, podría tratarse de un negociazo para alguien.
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