
Instalación de uno de los nuevos equipos
Tráfico
Revientan uno de los 24 nuevos radares blindados de la DGT
El organismo controlador del tráfico en España confirmó hace unos días la instalación de 24 nuevos equipos de radar en las carreteras españolas
Hace sólo unos días que la Dirección General de Tráfico anunciaba el despliegue de 24 nuevos radares de carretera entre fijos y de tramo. Estos nuevos equipos vienen a sumarse a los más de 2.200 que el organismo tiene distribuidos por la geografía española.
Tal y como es sabido los radares son extremadamente impopulares entre los conductores, lo que provoca que algunos se tomen la justicia por su mano y los destrocen.
Vandalismo habitual
Los actos vandálicos son especialmente frecuentes contra los equipos fijos, por lo que la DGT hace años que optó por licitar la compra de radares fijos con cajas blindadas. Para hacernos una idea se trata de cajas que superan los 20.000 euros, a lo que hay que sumar los 40.000 euros del velocímetro y la cámara que van en el interior.

Imagen de los nuevos radares blindados que usa la DGT
Además de estar colocadas a dos metros del suelo, con lo que directamente muchos no llegan ni a tocarlas, estas cajas deben estar fabricadas en acero de alta resistencia, con tornillería de aluminio y ventanas con cristales blindados de 23 milímetros de grosor.
Cristal de seguridad
Por si esto fuera poco las cajas deben estar climatizadas para evitar que se recalienten en verano o se hielen en invierno, un problema habitual de los equipos anteriores. Disponen además de conexión wifi y Bluetooth y de paneles solares, con lo cual se aseguran que pueden funcionar de forma autónoma.

Algunos optan por cortar el mástil directamente
Nada de esto ha servido para que los vecinos de Almería hayan destrozado el radar del Mamí, ubicado en la AL-3117, reventando literalmente los cristales de medición que usa la cámara y el velocímetro, dejándolos inservibles.

Imagen del radar del Mami, en Almería
Hace tiempo que la DGT ha detectado también actos vandálicos que directamente han cortado el mástil sobre el que se coloca la caja radar, hechos que también han sucedido en el Reino Unido, Italia y Francia.