P. Santiago Madrigal S.J. (1960-2023)
Renovador de la Teología
Su última publicación importante fue la participación en una obra colectiva en defensa del concepto de sinodalidad, uno de los ejes del pontificado del Papa Francisco
Nació en Casalarreina (La Rioja) en 1960 y falleció en Madrid el 7 de septiembre de 2023
Jesús Santiago Madrigal Terrazas
Había ingresado en la Compañía de Jesús en 1978, superando las etapas de formación de esa familia espiritual, formándose en Filosofía y Letras y Teología y ampliando sus estudios en el prestigioso Colegio Filosófico-Teológico San Jorge de Fráncfort, antes de emprender su brillante trayectoria académica en la Universidad Pontificia Comillas.
El Papa Francisco agradeció públicamente las aportaciones del padre Santiago Madrigal a la Teología moderna en el prólogo de un libro homenaje, titulado Non Omnis Moriar, publicado el pasado mes de julio. Se trata de una obra colectiva en la que participan varios de quienes, durante décadas, compartieron tareas intelectuales con el intelectual riojano. «En su magisterio», escribe el Santo Padre, «se descubren entrelazadas diversas claves de acceso a la comprensión del misterio de la Iglesia, que tejen una eclesiología con raíces históricas, ignaciana, misionera, contemporánea, alentada por el Concilio Vaticano II, ecuménica y romana, constituyendo una suerte de mistagogía eclesial ignaciana», antes de agradecer a Madrigal, en clave jesuítica, «el servicio intelectual a 'nuestra santa madre Iglesia hierárchica' [expresión sacada del epígrafe 353 de los Ejercicios de San Ignacio], eje de su teología y de su fe personal, como verdadero hijo de Ignacio de Loyola».
Un perfecto resumen de la trayectoria personal de Madrigal. Sin embargo, lo más emotivo fue la contribución del propio Madrigal, ya gravemente enfermo, a la obra, en la que reflexiona sobre su propio camino hacia el encuentro definitivo con Dios, y que cataloga como «una transfiguración luminosa de la noche oscura del alma que ha atravesado la prueba del dolor, del sufrimiento y de la proximidad de la muerte». Concluye: «No moriré del todo, algo de mí permanecerá, porque hay algo en la criatura humana que es inmortal, como la justicia o el amor, que son capaces de romper las cadenas de la parca».
Un sentido final para quien fue uno de los principales animadores del debate teológico en España durante los últimos treinta años. Para ser precisos, desde 1994, año en que leyó su tesis doctoral que presentó en la Universidad Pontificia Comillas, en la que transcurrió toda su carrera y de la que fue decano de dos facultades: la de Teología, primero y, posteriormente, de la de Derecho Canónico, sin olvidar su etapa al frente de la revista Estudios Eclesiásticos, editada por el mismo centro académico.
La producción intelectual de Madrigal, además de prolífica, explora diversos campos de la Teología que abarcan desde la espiritualidad de San Ignacio de Loyola a la eclesiología del Concilio Vaticano II, pasando por estudios sobre las figuras del Papa Benedicto XVI o del teólogo jesuita Karl Rahner, en cuyo honor organizó unas jornadas en Madrid con motivo de su centenario. Su última publicación importante fue la participación en una obra colectiva en defensa del concepto de sinodalidad, uno de los ejes del pontificado del Papa Francisco. Una prueba más del afán de renovación eclesial que caracterizó la vida y obra del padre Madrigal.
Comentarios
