Fundado en 1910

26 de abril de 2024

Desde este miércoles, 20 de abril, ha dejado de ser obligatoria la mascarilla en las Iglesias

Desde este miércoles, 20 de abril, ha dejado de ser obligatoria la mascarilla en las iglesiasCathopic

Las diócesis españolas apelan al «sentido común» ante la retirada de las mascarillas en los templos

«Responsabilidad» y «prudencia» son algunas de las peticiones de los obispos a los fieles que acudan a la Iglesia con la cara descubierta

Desde este miércoles, 20 de abril, ha dejado de ser obligatoria llevar la mascarilla en lugares cerrados. Desde que se publicó en el BOE, distintas diócesis españolas han publicado sus recomendaciones al respecto. La primera en hacerlo fue la archidiócesis de Madrid, donde el cardenal Carlos Osoro ha animado a la «prudencia y al cuidado de los fieles en situación de mayor riesgo ante la COVID-19».
Esta sede episcopal ha precisado en un comunicado que aunque el uso de la mascarilla deje de ser obligatorio, en el Real Decreto «se recomienda que la sigan usando las personas con mayor vulnerabilidad». Se aconseja también mantenerla «en cualquier situación en la que se tenga un contacto prolongado con personas a distancia menor de 1,5 metros» y que haya un «uso responsable» en «espacios cerrados de uso público en los que las personas transitan o permanecen un tiempo prolongado». A estas recomendaciones oficiales se suscriben también el resto de diócesis que, de momento, se han pronunciado sobre el tema.
Se recomienda un uso responsable de las mascarillas en espacios cerrados, entre los que se incluyen los templos y locales de pastoral

Se recomienda un uso responsable de las mascarillas en espacios cerrados, entre los que se incluyen los templos y locales de pastoral

Un uso responsable

Por su parte, la archidiócesis de Sevilla ha apelado a la «responsabilidad de curas y fueles para que se siga teniendo presente la necesidad de cuidar y proteger a los más vulnerables», siempre «poniendo en práctica las medidas de protección y desinfección que se consideren convenientes», se puede leer en el comunicado publicado por la sede.
Ante la recomendación del uso responsable del cubrebocas en espacios cerrados, la diócesis de Juan José Asenjo, apunta que por estos se puede entender «los templos y demás locales de pastoral, así como en los eventos multitudinarios».
Luis Argüello, obispo auxiliar de Valladolid y vicario general ha hecho pública también una carta dirigida a los sacerdotes y a todos los fieles vallisoletanos, en la que ha recordado que «la pandemia continúa», por lo que «queda a la prudencia y sentido común de personas adultas el seguir utilizándolas cuando las circunstancias lo requieran».

Durante los sacramentos

En Valladolid consideran conveniente el uso de la mascarilla, tanto en el fiel como en el sacerdote, cuando se celebre el sacramento de la penitencia, si se realiza en el confesionario o a distancia inferior a un metro y medio. En cambio, en residencias de mayores, capellanías de hospitales o velatorios habría que atender a las prescripciones del lugar.
Unas recomendaciones más concretas da la diócesis de Zamora, en la que se anima a que el celebrante utilice cubrebocas en el momento de distribución de la comunión, que se emplee gel hidroalcohólico al menos antes y después de la comunión y mantener el gesto de paz sin contacto físico, sobre todo cuando las personas no son convivientes.

Una nueva etapa

«Desde el estallido de la pandemia, han sido numerosas las restricciones que han alterado las celebraciones litúrgicas», inciden desde la archidiócesis de Burgos. La supresión del culto público o la clausura de algunos templos e iglesias, la limitaciones estrictas de aforo... son algunos ejemplos de ello. «Con la supresión de la obligatoriedad de mascarillas en interiores, la pandemia parece entrar en una nueva etapa», en la que se permite que los actos de culto vuelvan a recuperar las costumbres previas.
Desde la vicaría general de Burgos proponen algunas recomendaciones, como el uso de gel a la entrada de las iglesias y en sus presbiterios. Durante la celebración de la penitencia sí que será obligatoria la mascarilla, si se realiza en el confesionario o a una distancia inferior a 1,5 metros. En el resto de situaciones, «queda la libertad de usarla, especialmente cuando tanto el sacerdote como los fieles sean más vulnerables a infecciones respiratorias», porque, según apunta la propia archidiócesis, no hay que olvidar el «sentido común» ya que «la pandemia aún no ha terminado».
Comentarios
tracking