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Será la segunda ordenación que realice Atilano Rodríguez como obispo de Sigüenza-GuadalajaraT.M.

Ordenaciones sacerdotales en España  Sigüenza acogerá su primera ordenación sacerdotal de los últimos siete años

Enrique López Ruiz, de 32 años, será ordenado sacerdote tras más de un lustro sin vocaciones

No solamente por la pandemia, ni por la reestructuración de la Iglesia. No solamente por el mundo, ni por la falta de respuesta a la llamada de Dios. Hay algo más que los obispos españoles están tratando de dilucidar y que tiene a la institución contra las cuerdas: no hay jóvenes que quieran consagrar su vida al sacerdocio.
Hace tan solo unos días, la Conferencia Episcopal Española, en el contexto de la Jornada de Oración por la Vocaciones, señalaba un dato esclarecedor: en el curso 2021-2022 hay en España 1.028 seminaristas mayores, la cifra más baja en 19 años. En la actualidad, señalan desde la CEE, hay 811 seminaristas menores y el año pasado se ordenaron 125 sacerdotes diocesanos.
Sin embargo, la catedral de Sigüenza (Guadalajara), volverá a acoger, este domingo por la tarde, una ordenación sacerdotal, tras siete años sin celebrarse ninguna en la diócesis.

Una brizna de esperanza

Se trata de Enrique López Ruiz, de 32 años y natural de la capital alcarreña, que será ordenado sacerdote a partir de las 17.30 horas, en la catedral seguntina, donde se celebrará la Eucaristía y ordenación sacerdotal. Esta ordenación será también la segunda que realice el obispo Atilano Rodríguez Martínez; la primera fue la de Moisés Tena, el 31 de mayo de 2015, actual párroco de la Unidad Pastoral de Torremocha del Campo.
Durante este curso, cuentan desde la página web del obispado, López ha servido pastoralmente en las parroquias de San Pascual Baylón y Beata María de Jesús, en Guadalajara capital, al tiempo que cursa estudios de licenciatura en Catequética y Evangelización.
Por otro lado, para el 3 de julio próximo está prevista, en la concatedral, la ordenación diaconal del seminarista diocesano Emilio Vereda Cuevas. Sin duda, una brizna de esperanza, de pastores con su rebaño, que espera dinamizar y suscitar en los jóvenes, con su testimonio y entrega, que elegir el camino de Jesús es siempre motivo de dicha, a pesar de los sinsabores a los que a veces nos somete la vida.