María Bailly-Baillière y Víctor Córdoba, miembros del movimiento católico Hakuna, nos abren las puertas de El Estudio, su sede, un antiguo convento de clausura de las Mártires Concepcionistas.
«Me alegra mucho el bien que está haciendo Hakuna por y para la Iglesia. Esto antes era un convento que estaba ya casi abandonado, y Hakuna está llenando de vida lugares que estaban quedando obsoletos», cuenta Miguel. Además, María señala que todo el mundo es bienvenido y que «cualquiera persona se sentirá completamente acogida».
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