COVID-19, gripe y VRS: cómo diferenciarlos
Infoveritas
¿Estás resfriado? Cómo diferenciar si tienes covid, gripe o VRS
Estas tres infecciones comparten numerosos síntomas, lo que puede dificultar su identificación inicial. La fiebre es uno de los signos comunes a todas ellas
La llegada del otoño y las primeras bajadas de temperatura suelen coincidir con un incremento en la circulación de virus respiratorios. Durante estos meses, es habitual la aparición de enfermedades como la gripe, que históricamente ha sido una constante en esta época del año. A estas dolencias se han sumado en los últimos años otras como la COVID-19, provocada por el coronavirus SARS-CoV-2, y el virus respiratorio sincitial (VRS), que afecta especialmente a la población infantil y es la causa principal de la bronquiolitis.
Estas tres infecciones comparten numerosos síntomas, lo que puede dificultar su identificación inicial. La fiebre es uno de los signos comunes a todas ellas, y, ante su aparición, es frecuente que surjan dudas sobre cuál de estas patologías se está padeciendo y cómo debe actuarse.
Desde la plataforma INFOVERITAS se ofrecen orientaciones para aprender a distinguir los síntomas característicos de cada una. En primer lugar, conviene conocer la naturaleza de estos virus. Tal como explican en la Clínica Universidad de Navarra, la gripe está causada por los virus de la influenza, clasificados en tres tipos: A, B y C. El tipo A es responsable de las epidemias más extendidas y graves; el B provoca brotes menos intensos y cuadros clínicos más leves; mientras que el tipo C rara vez desencadena enfermedad en humanos.
Por su parte, la COVID-19 tiene su origen en el virus SARS-CoV-2. Según recuerda la Organización Mundial de la Salud (OMS), se tuvo conocimiento de este patógeno por primera vez el 31 de diciembre de 2019. Desde entonces, ha pasado a formar parte del escenario sanitario global, generando una amplia gama de manifestaciones clínicas.
En cuanto al VRS, se trata de un virus estacional que suele circular entre octubre y marzo. De acuerdo con el portal de salud de la Comunidad de Madrid, es el principal responsable de la bronquiolitis, una infección respiratoria que afecta mayoritariamente a los niños más pequeños.
Respecto a los síntomas de la gripe, la Clínica Universidad de Navarra indica que suelen presentarse fiebre, dolores musculares y articulares, cefalea y un malestar generalizado. También pueden aparecer tos, secreción nasal y dolor de garganta. Aunque el cuadro puede variar en intensidad y duración según el paciente, en algunos casos se manifiestan igualmente molestias digestivas como dolor abdominal, diarrea o náuseas.
En el caso de la COVID-19, la OMS señala como síntomas más habituales la fiebre, escalofríos y dolor de garganta. Sin embargo, se suman otras manifestaciones como dolor muscular, fatiga intensa, congestión o secreción nasal, cefalea, molestias oculares, tos persistente, alteraciones digestivas —como náuseas, vómitos o diarrea— y la conocida pérdida del olfato y el gusto.
En lo referente al virus respiratorio sincitial, desde la Comunidad de Madrid se enumeran síntomas como tos, fiebre, estornudos, irritabilidad, mucosidad abundante, pérdida de apetito, dificultad respiratoria y sibilancias. Algunos de estos signos, como la fiebre y la tos, son comunes también a la gripe y la COVID-19, lo que complica el diagnóstico sin pruebas específicas.
Diferenciar entre estos tres virus exclusivamente por los síntomas resulta difícil. Así lo advierten los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, que subrayan que «no es posible diferenciar la influenza del COVID-19 solo observando los síntomas, ya que muchos de los signos y síntomas son los mismos. Es necesario realizar pruebas de detección para confirmar un diagnóstico».
Además, el tiempo de incubación varía entre estos virus. En el caso de la gripe, los síntomas aparecen entre uno y cuatro días tras el contagio. En cambio, la COVID-19 puede tardar entre dos y catorce días en manifestarse, según el portal de noticias de salud del Gobierno del Estado de Oregón. En cuanto al VRS, sus síntomas se desarrollan progresivamente entre cuatro y seis días después de la exposición al virus. Según el Departamento de Salud del Estado de Nueva York, su diagnóstico suele hacerse con base en los síntomas clínicos, reservándose las pruebas de laboratorio para los casos graves o en contextos de brotes epidémicos.
En definitiva, aunque existen algunos matices que permiten orientar el diagnóstico, las similitudes entre los síntomas de la gripe, la COVID-19 y el VRS hacen imprescindible el uso de pruebas específicas para confirmar la enfermedad y aplicar el tratamiento más adecuado en cada caso.