Estos son algunos consejos para evitar los atracones por ansiedad
En muchas ocasiones, esta afección se manifiesta en una dependencia y adicción creciente hacia la comida
Motivos
Factores que indican el problema
- Consumir alimentos en momentos de estrés o ansiedad. Si en los momentos de inquietud y temor se recurre a alimentos poco saludables como dulces, snacks o carbohidratos con la finalidad de combatir estas emociones.
- Comer sin sentir hambre. Si se continúa comiendo a pesar de no tener hambre para conseguir una distracción de otros problemas y estabilidad emocional.
- Sensación de pérdida de control. Esta sensación proviene de una incapacidad de controlar la cantidad de comida que consume una persona cuando está experimentando un estado ansioso, y posteriormente culpa o vergüenza después de comer.
Consejos para corregir los atracones
- Comer de forma consciente, lo que implica prestar atención a la comida que se come, saboreando cada bocado y disfrutando del proceso de comer. También ayuda a ser conscientes de las señales físicas de hambre y saciedad, lo que puede evitar los excesos. Comer de forma consciente también puede ser positivo para controlar la cantidad de alimentos que se ingieren. Por ejemplo, masticando un determinado número de veces la comida, dejar de comer cuando se esté satisfecho o evitar distracciones durante las comidas.
- Identificar y evitar los desencadenantes de la ansiedad, puede ser desencadenada por factores como el estrés, la falta de sueño y la falta de actividad física.
- Planificar las comidas puede ayudar a prevenir el atracón por ansiedad, ya que permite controlar de antemano las comidas que se van a ingerir, intentando que siempre sean alimentos nutritivos. Esto es muy positivo para evitar la tentación de comer en exceso en momentos de ansiedad o estrés.
- Buscar apoyo emocional para rebajar la carga emocional. Hablar con un terapeuta o un amigo cercano es beneficioso para procesar las emociones y es una forma de manejar la ansiedad sin recurrir al atracón de comida. Además, puede ser de ayuda para estar menos aislados y más conectados con los demás.
- Practicar la atención plena, una práctica que implica prestar atención consciente al momento presente sin juzgar. Ayuda a reducir la ansiedad, ya que permite reconocer y aceptar los pensamientos y emociones sin reaccionar impulsivamente. La atención plena es óptima para reconocer esos pensamientos y emociones, sin reaccionar impulsivamente ante ellos. A través de la práctica de la atención plena, es posible aprender a reconocer patrones de pensamiento y comportamiento y, con el tiempo, cambiarlos para evitar el atracón por ansiedad. Esta se puede practicar a través de ejercicios de respiración, meditación o yoga, realizando actividades cotidianas como lavar los platos, caminar o ducharse. Simplemente, trata de estar presente en el momento y de que la persona se enfoque en sus sensaciones y pensamientos durante el momento, sin juzgarlos.