Los beneficios de beber medio litro de cerveza a la semana
Comer pescado azul, frutas y cereales puede reducir el riesgo de artritis reumatoide
La artritis reumatoide es un trastorno inflamatorio crónico que se engloba en el grupo de las Enfermedades Reumáticas Autoinmunes Sistémicas (ERAS) y que afecta principalmente a las articulaciones pero que también puede dañar distintos sistemas corporales como la piel, los ojos, los pulmones, el corazón o los vasos sanguíneos. Los principales síntomas son articulaciones sensibles, calientes e hinchadas, rigidez articular y cansancio, fiebre y pérdida del apetito. No obstante, alrededor de un 40 % de las personas que padecen esta enfermedad autoinmune también presentan signos y síntomas que no implican a las articulaciones.
Llevar una alimentación saludable puede reducir la actividad de la enfermedad y mejorar la función física. Según una nueva investigación de la Universidad de Leeds, que analizó 30 estudios diferentes, entre ellos, casi 10.000 personas con artritis reumatoide, el consumo moderado de alcohol y una mayor ingesta de frutas, pescado azul y cereales están relacionados con un menor riesgo de artritis reumatoide, mientras que el té y el café pueden estar relacionados con un mayor riesgo.
Los resultados muestran que algunos factores dietéticos, como el pescado azul y la vitamina D, podrían tener un papel protector y ayudar a evitar que las personas desarrollen la enfermedad. Comer más cereales, incluidos los integrales y los cereales para el desayuno, y fruta parece estar relacionado con un menor riesgo de artritis reumatoide, mientras que beber más té podría estar relacionado con un mayor riesgo.
Qué pasa con la cerveza o el vino
Pero los resultados no son tan claros como parecen. Según la autora de la investigación Yuanyuan Dong, beber dos unidades de alcohol a la semana –el equivalente a medio litro de cerveza lager o de cerveza de menor graduación o una copa de vino estándar a la semana– puede tener un efecto protector, pero el consumo excesivo aumenta el riesgo de desarrollar la enfermedad.
El efecto protector del alcohol disminuyó a medida que aumentaba el consumo, desapareciendo por completo con aproximadamente 7,5 unidades de alcohol por semana (unas cuatro pintas de cerveza/lager/sidra de menor graduación por semana o 3,5 vasos de vino estándar).
La investigadora explica: «La artritis reumatoide es una enfermedad multifactorial típica, impulsada tanto por factores genéticos como ambientales. Mi investigación estudia si los factores dietéticos contribuyen al riesgo de artritis reumatoide al aumentar la inflamación y afectar el sistema inmunológico» y añade: «Estos hallazgos ofrecen una comprensión más profunda de cómo la dieta puede afectar el riesgo de artritis reumatoide y sugieren posibles modificaciones dietéticas para la prevención y el tratamiento de la enfermedad».
Qué alimentos comer
El pescado azul, la vitamina D y las verduras mostraron posibles efectos protectores contra el desarrollo de la artritis reumatoide, pero la asociación no fue lineal y la evidencia mostró que una ingesta moderada disminuye el riesgo, pero el efecto se estabiliza o incluso disminuye si la ingesta de una persona aumenta más allá de este nivel.
Un mayor consumo de frutas y cereales se asoció con un menor riesgo de padecer artritis reumatoide.
El consumo de alcohol entre bajo y moderado (en concreto, cerveza) se asoció a un menor riesgo de artritis reumatoide, y cada aumento de dos unidades semanales de alcohol se asoció a una reducción del riesgo del cuatro por ciento. Sin embargo, el efecto protector disminuyó con un mayor consumo; el riesgo de AR comenzó a aumentar una vez que se alcanzó unas 7,5 unidades de alcohol por semana, lo que indica que no hubo ningún efecto protector con niveles de consumo más elevados.
Qué alimentos no comer
El consumo de té se asoció con un aumento del 4 % en el riesgo por cada taza adicional al día, aunque los investigadores aseguran que el riesgo general sigue siendo bajo. El té tiene muchos beneficios para la salud, enfatizaron los investigadores, y las personas deben considerar su dieta general y su estilo de vida al tomar decisiones sobre qué comer y beber.
El café también mostró una asociación menos pronunciada con un mayor riesgo de artritis reumatoide, lo que sugiere la necesidad de más investigaciones.