El Infarto de miocardio es un tipo de cardiopatía que aparece cuando el corazón no recibe suficiente sangre
Tres señales que indican que tu corazón está al límite, según un cardiólogo
Este pasado domingo un corredor de la Medio Maratón de Madrid fallecía por un paro cardíaco. Identificar a las personas con riesgo de enfermedad cardíaca y reducir ese riesgo es el santo grial de la cardiología preventiva. El doctor Aurelio Rojas explica en su canal de TikTok, las tres señales que alertan de un posible problema cardiaco.
La primera de estas señales se llama ortopnea qué quiere decir que no se puede respirar adecuadamente cuando te encuentras completamente tumbado: «En este caso lo que vamos hacer es sentarnos en el filo de la cama para poder recuperar el aliento».
La segunda señal es la angina de pecho: «Consiste en una presión muy fuerte en el centro del pecho que obliga a parar cuando se realiza un esfuerzo físico, como, por ejemplo, subir una cuesta a unas escaleras» y añade: «Esta presión normalmente desaparece a los pocos segundos de calmarse o sentarse» aunque en personas mayores o mujeres se puede notar más dificultad respiratoria o cansancio que dolor.
La tercera señal de que el corazón no está funcionando bien es la retención de líquidos: «En este caso se va a notar, sobre todo, que se hinchan las piernas y cuando se toca con el dedo se queda totalmente marcado la forma de ese dedo. Esto se llama edema con fóvea».
Factores de riesgo cardiovascular
Los principales factores de riesgo cardiovascular son los siguientes:
El colesterol es una sustancia grasa natural presente en todas las células del cuerpo humano. La mayor parte se produce en el hígado, aunque también se obtiene a través de algunos alimentos. Si sus niveles en sangre se elevan producen hipercolesterolemia. Está demostrado que las personas con niveles de colesterol en sangre de 240 tienen el doble de riesgo de sufrir un infarto de miocardio que aquellas con cifras de 200.
La diabetes mellitus es una enfermedad que se produce cuando el páncreas no fabrica insulina suficiente o cuando esta no logra actuar en el organismo porque las células no responden a su estímulo. Si la producción de insulina es insuficiente la glucosa se acumula en la sangre y va dañando progresivamente los vasos sanguíneos, lo que aumenta el riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular.
La salud periodontal, de las encías, puede influir en la salud general del organismo y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Los expertos señalan que el estrés emocional y los eventos coronarios están relacionados. De hecho, se ha demostrado que existe un aumento del riesgo de infarto agudo de miocardio durante las dos horas posteriores a un episodio de alteración emocional significativo.
El sedentarismo o la inactividad física está considerado uno de los mayores factores de riesgo en el desarrollo de este tipo de enfermedades.
Diferentes estudios asocian una frecuencia cardiaca descontrolada al riesgo de muerte. Por regla general, la frecuencia normal en reposo oscila entre 50 y 100 latidos por minuto (lpm).
Se entiende por hipertensión la elevación de los niveles de presión arterial de forma continuada o sostenida. Según explica la Fundación Española del Corazón, «La hipertensión supone una mayor resistencia para el corazón, que responde aumentando su masa muscular (hipertrofia ventricular izquierda) para hacer frente a ese sobreesfuerzo. Este incremento de la masa muscular acaba siendo perjudicial porque no viene acompañado de un aumento equivalente del riego sanguíneo y puede producir insuficiencia coronaria y angina de pecho. Además, el músculo cardiaco se vuelve más irritable y se producen más arritmias».
Una mala alimentación también es un factor de riesgo siendo la dieta mediterránea la más beneficiosa a nivel cardiovascular. La obesidad también se considera un factor de riesgo cardiovascular. No obstante, este depende en gran medida de la localización de la grasa, siendo aquella que se acumula en el abdomen la que afecta en mayor medida al corazón.
El tabaquismo eleva las posibilidades de tener un problema cardiaco. Según explica la doctora Regina Dalmu González-Gallarza, cardióloga en el Hospital de La Paz de Madrid, en la Fundación Española del Corazón, los fumadores tienen tres veces más riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular que el resto de la población.