En febrero, dos sanitarias inyectaban una vacuna de la covid-19 a una usuaria de una residencia en Valencia
Coronavirus
España no ofrecerá la cuarta dosis de la vacuna contra la covid a los mayores de 65 años
La Agencia Europea del Medicamento insistió el pasado jueves en que no hay evidencia científica para aconsejar un nuevo pinchazo
La variante ómicron ha vuelto a Europa. Más bien, nunca se ha ido, pero parecía que su trasmisión y los contagios habían cesado. En las próximas semanas se espera un cambio de paradigma, por lo menos en lo que a la dosis de recuerdo se refiere.
Ya son varios países los que están inoculando la cuarta dosis de la vacuna contra la COVID-19 a los mayores de 65 años. La última incorporación ha sido Francia. Además, Alemania la ha extendido a los mayores de 70 años, a los residentes en geriátricos, a las personas inmunodeprimidas y a los sanitarios, mientras las farmacéuticas Pfizer y Moderna recomiendan la cuarta dosis para todos los mayores de 65 años.
El planteamiento de los países que están inoculando la dosis de refuerzo no coincide con la de los expertos internacionales y españoles, ya que consideran prematuro aún administrar un vial más. Por ahora, el Ministerio de Sanidad de España no inoculará esta dosis, solo la recibirán las personas inmunodeprimidas porque tienen un riesgo mayor ante la exposición del virus.
Fuentes sanitarias confirman que de momento no se llevará a cabo la inoculación de la cuarta dosis, sin embargo, anuncian que probablemente, si el coronavirus sigue evolucionando, se empiece a administrar en los próximos meses, siendo la fecha más segura en otoño.
La EMA no ve evidencia científica
La Agencia Europea del Medicamento (EMA) insistió el pasado jueves en que no hay evidencia científica para aconsejar un nuevo pinchazo. El jefe de estrategia de vacunación de la EMA, Marco Cavaleri, asegura que de momento «no existen aún pruebas que justifiquen una recomendación de una segunda dosis de refuerzo para la población general».
Por otro lado, la directora del Departamento de Salud Pública y del Ambiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), María Neira, comenta que «por el momento no hay la evidencia suficiente para que sea necesario».
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