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El gran negocio detrás del aborto en España: «Constituye una actividad multimillonaria»
En España, según los últimos datos, 103.097 bebés no pudieron crecer y formarse en el seno materno, 4.781 más que en 2022 (lo que supone un aumento del 4,8 %)
En diciembre de 2022, en España se aprobó una de las peores leyes para el ser humano: la ley del aborto. Se trata de una norma que, aunque el Gobierno y sus socios apoyan, permite terminar a las mujeres de 16 y 17 años, sin consentimiento paterno, con la vida de su hijo. En nuestro país, desde su luz verde, esta polémica práctica forma parte de la cartera de servicios de la Red Sanitaria Pública; sin embargo, muchas mujeres deciden irse a clínicas privadas, ya que no hay médicos dispuestos a acabar con la vida de los más indefensos. Esta práctica genera ingresos millonarios.
Que ocurra esto no es casualidad, explica, Álvaro Ortega, presidente de la Fundación +Vida, y es que en la mayoría de los hospitales públicos los ginecólogos son objetores de conciencia porque saben «mejor que nadie» la vida humana intrauterina que lleva la mujer y su desarrollo embrionario.
Alrededor del aterrador mundo del aborto, hay desarrollado una gran industria privada. De hecho, la Sanidad Pública en muchos casos «tiene que remitir a la privada para llevar a cabo los abortos». A este gran negocio del aborto –el que se produce en las clínicas privadas– hay que sumarle otro: el de la fecundación in vitro.
La fecundación in vitro es «la creación artificial de vida humana», donde también se producen abortos. Ellos lo denominan como «el descarte de embriones»: se rechazan embriones dentro de lo que es una regulación in vitro, pero realmente «lo que se están produciendo son abortos». Esta práctica supone una vía más de negocio dentro del aborto. Es decir, «de la industria de la cultura de la muerte».
Si se suma el negocio del aborto y de la fecundación in vitro, la cultura de la muerte se sitúa en el cuarto puesto de los mayores negocios del mundo. Por detrás del tráfico de armas, de las drogas y de la prostitución.
¿Cuánto cuesta abortar en España?
El Ministerio de Igualdad, dirigido por aquel entonces por Irene Montero, sabía muy bien lo que hacía. Mientras que un parto natural en el hospital cuesta entre 150 y 200 euros, los abortos generan una actividad económica muy grande en el país, más, cuando en la práctica, puede haber dificultades como la objeción de conciencia de los facultativos, pocos hospitales habilitados o largas esperas.
Siguiendo en la misma línea, si nos referimos al coste de la fecundación in vitro por ciclo, en total la mujer se gasta de media unos 10.000 euros.
Precios de un aborto
A estos precios habría que sumarle costes adicionales, como son las ecografías, las visitas, las urgencias nocturnas o alguna complicación posterior a la cirugía.
En España, según los últimos datos, de 2024, 103.097 bebés no pudieron desarrollarse en el seno de su madre, 4.781 (4,8 %) más que en 2022. Esto significa que, de media, aproximadamente 282 mujeres deciden acabar con la vida de los nasciturus cada día.