Igualdad pide «disculpas» por los «fallos» en pulseras antimaltrato

La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Carmen Martínez Perza, ha expresado este jueves sus disculpas públicas a las víctimas de violencia machista a raíz de las incidencias detectadas en el funcionamiento de las pulseras telemáticas de control a maltratadores. Un reconocimiento que ha hecho al inicio de su comparecencia ante la Comisión de Seguimiento y Evaluación del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, celebrada en el Congreso.

«Antes de avanzar, si me permiten, quería pedir disculpas a todas aquellas mujeres supervivientes de la violencia machista que se están sintiendo inquietas en este momento por la situación que estamos viviendo», declaró Martínez Perza, quien aseguró que el «sufrimiento» de las víctimas es también el de la institución que representa. «Su bienestar y su seguridad es lo que nos mueve y por lo que trabajamos a diario en esta Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género», subrayó.

Su intervención se centró en aclarar la gestión del sistema de dispositivos de control telemático, en un contexto marcado por las referencias a presuntos «fallos» señalados en la Memoria de la Fiscalía General del Estado correspondiente a 2024, presentada este año. Según esa documentación, algunos procesos judiciales habrían resultado en absoluciones debido a incidencias en la operatividad de estos sistemas y con el proveedor del servicio.

Sin embargo, Martínez Perza cuestionó la base empírica de dicha valoración. «La Memoria de la Fiscalía de 2025 recoge la de 2024. Esto es importante. Y se redacta con mucha antelación refiriéndose a un número importante de casos, que no es más que una valoración opinativa que no se corresponde con datos», señaló. En este sentido, afirmó haber solicitado información concreta a la Fiscalía, sin haber recibido aún datos detallados que sustenten las afirmaciones vertidas en el documento.

En defensa del sistema, la delegada denunció que ciertas informaciones han alimentado una «alarma social» innecesaria y han socavado la confianza en un instrumento que calificó de «esencial». Recalcó que, según los datos oficiales, «ninguna mujer con dispositivos ha sido asesinada», y que a fecha 31 de agosto, 4.700 víctimas contaban con este tipo de protección activa.

El sistema Cometa –acrónimo del Sistema de Seguimiento por Medios Telemáticos del Cumplimiento de las Prohibiciones de Aproximación en Violencia de Género y Violencia Sexual– fue descrito por la responsable gubernamental como una pieza integrada dentro de un conjunto «completo, robusto y complejo» de medidas de protección.

Explicó que el funcionamiento del sistema se basa en la gestión diaria de más de 30 millones de geoposicionamientos, y que cualquier intento de manipulación del dispositivo o ingreso del agresor en zonas de exclusión activa inmediatamente una alerta en la Sala Cometa, lo que da lugar a la aplicación de protocolos de seguridad. Además, precisó que la instalación de los dispositivos se realiza en un plazo máximo de 24 horas desde que lo dictamina un juez, y que en muchos casos se completa en menos de 12.

En relación con la reciente transición del servicio entre Telefónica y Vodafone, Martínez Perza admitió una «dificultad temporal» a la hora de recuperar información puntual de la base de datos gestionada por la empresa anterior, lo cual afectó a algunos procedimientos judiciales. No obstante, aseguró que la información fue enviada posteriormente y remarcó que los informes técnicos del sistema Cometa no son la única prueba que valora un juzgado, que también se apoya en atestados policiales o declaraciones de testigos.

La delegada también defendió el «seguimiento constante» que se realiza desde su departamento sobre el servicio, mediante la coordinación diaria entre su equipo y la Sala Cometa, así como la recepción regular de informes semanales y mensuales, reuniones de seguimiento y programas de formación.

Por último, avanzó algunas de las mejoras técnicas que el Ministerio de Igualdad planea incorporar en los futuros pliegos del contrato, entre ellas el desarrollo de una aplicación que permitirá a la Delegación consultar la información en tiempo real, así como la exigencia de que los nuevos dispositivos que se adquieran sean totalmente compatibles con el sistema actual y no manipulables.

Con este balance, Martínez Perza buscó transmitir un mensaje de compromiso, transparencia y voluntad de mejora, en un momento en que el sistema de protección a las víctimas se encuentra bajo especial escrutinio social e institucional.