Enfermero con una vacuna contra la gripe
Europa llama a los españoles a vacunarse «sin demora» de la variante K por la circulación temprana de la gripe
También han pedido que los trabajadores sanitarios o de centros de cuidados a largo plazo se inoculen la dosis recomendada
El Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) ha recomendado la vacunación «sin demora» por una «inusual» circulación temprana de la variante K de la gripe en los países de la Unión Europea y el Espacio Económico Europeo (UE/EEE). Y es que, según la entidad, se ha adelantado entre tres y cuatro semanas con respecto a las dos temporadas anteriores.
Edoardo Colzani, jefe de Virus Respiratorios del ECDC, ha comentado que este año están viendo «un aumento en la detección de la gripe» precoz, lo que significa que el tiempo es crucial. Así, ha señalado que si cumple los requisitos para vacunarse es mejor no esperar. Vacunarse ahora es una de las maneras «más eficaces de protegerse» y proteger a las personas que nos rodean, ha afirmado.
La responsable de la propagación de esta nueva cepa es el subclado K del gen A(H3N2), según una evaluación de riesgos publicada a lo largo de la jornada por el ECDC, que ha insistido en la importancia de que todas las personas que puedan vacunarse lo hagan, pues un número de contagios superior al habitual supondría una «presión adicional» sobre los sistemas sanitarios.
«Aunque persiste la incertidumbre sobre el impacto en la salud pública de la próxima temporada de gripe, el ECDC se está preparando para el escenario de que Europa se enfrente a una temporada de gripe más grave que las anteriores, especialmente si la cobertura de vacunación es baja», han añadido desde el organismo.
Por todo ello, el ECDC ha insistido en la vacunación de las personas más vulnerables, entre las que se incluyen las personas mayores de 65 años, las mujeres embarazadas, las personas con enfermedades crónicas o subyacentes o inmunodeprimidas, y las personas que viven en entornos cerrados, como residencias de ancianos.
Del mismo modo, ha pedido que los trabajadores sanitarios o de centros de cuidados a largo plazo se vacunen, y que tanto los centros sanitarios como las residencias de ancianos refuercen sus planes de preparación y medidas de prevención y control de infecciones, así como animar al personal y a los visitantes a utilizar mascarillas durante los periodos de mayor circulación de virus respiratorios.
Para los profesionales sanitarios, el ECDC ha recomendado considerar la administración rápida de antivirales a los pacientes con mayor riesgo de enfermedad grave para reducir las complicaciones.
En el caso de los proveedores de atención médica, ha pedido que consideren el uso de profilaxis antiviral durante los brotes en entornos cerrados, por ejemplo, residencias de ancianos.
Por último, ha subrayado la importancia de que los países promuevan una comunicación «clara y adaptada» a las necesidades específicas sobre vacunación, higiene de manos y etiqueta respiratoria para ayudar a reducir la transmisión comunitaria.