Cargador inalámbrico MagGo de Anker
¿Son mejores los móviles con carga inalámbrica? Esto es lo que debes saber antes de elegir
Este avance, antes reservado a la gama alta, evoluciona con nuevos estándares que permiten cargar a más velocidad en busca de un futuro sin cables
En solo una década, la carga inalámbrica ha pasado de ser una curiosidad tecnológica con cargas lentas de 7,5W a convertirse en un sello de identidad de los smartphones más avanzados del mercado donde las velocidades pueden llegar a 25W. En 2025, los fabricantes buscan diferenciarse no solo en cámaras o pantallas, sino también en la velocidad y eficiencia con las que los dispositivos recuperan energía sin necesidad de cables.
El principio físico que sostiene la carga inalámbrica es la inducción electromagnética. Una base transmite energía hacia el dispositivo a través de campos magnéticos lo que permite que se recargue con solo dejarlo sobre la superficie compatible. El estándar Qi, liderado por el Wireless Power Consortium, es hoy el rey indiscutible, con la incorporación del nuevo Qi2. Esta versión permite cargas de hasta 25W, una cifra impensable hace apenas unos años, que mejoran la velocidad y reducen el calor, dos de las limitaciones más comunes.
Anker MagGo
Las principales marcas de smartphones han integrado la carga inalámbrica en sus gamas medias y altas. Apple ha apostado por MagSafe que optimiza la alineación magnética y permite cargas rápidas y seguras en los iPhone más recientes. Samsung trabaja con Wireless PowerShare y añade la opción de carga inversa a otros dispositivos como auriculares o relojes inteligentes desde el propio móvil. Xiaomi, OPPO y Huawei disponen de tecnologías propias que alcanzan velocidades de hasta 80W en modelos punteros como el Xiaomi 14 Ultra que llegan incluso a superar las cargas rápidas por cable.
5 consejos para comprar un cargador inalámbrico
- Verifica que el cargador tenga certificación Qi o Qi2.
- Busca cargadores que ofrezcan al menos 15W para una recarga rápida y eficiente.
- Un soporte vertical permite usar el teléfono de forma más cómoda mientras carga.
- Valora la compatibilidad multidispositivo para cargar auriculares o relojes inteligentes además del móvil.
- Examina las opiniones y la garantía del fabricante, y da prioridad a marcas reconocidas que aseguran calidad como Belkin o Anker al margen de los cargadores que ofrezcan las marcas.
La comodidad es lo que más se busca. Basta dejar el smartphone sobre la base para que comience la carga y evite el uso diario de cables que acaban enredándose. Además, la implementación de sistemas magnéticos ha reducido errores de alineación y el desgaste de los puertos de carga lo que permite prolongar la vida útil de los dispositivos. La universalidad también es importante, una sola base puede alimentar varios aparatos compatibles, desde móviles hasta auriculares.
Belkin soporte de carga inalámbrica
Hay retos por delante, no hay duda. La eficiencia energética es inferior a la carga por cable tradicional, aunque las diferencias se acortan con cada generación. Muchos móviles cargan todavía lentos de manera inalámbrica, aunque la competencia entre fabricantes promete acortar distancias en próximos lanzamientos. Otro punto a considerar es el calor ya que la energía disipada sigue siendo alta y esto puede afectar la batería en usos prolongados.
Carga por Qi2
La llegada del estándar Qi2 es un hito porque incluye imanes de precisión y mayor compatibilidad entre marcas. La idea es preparar el camino para el momento donde la carga inalámbrica sea la única opción en unos móviles sin puertos de carga ni ranuras de SIM. El objetivo es ofrecer cargas rápidas, seguras y energéticamente eficientes, incluso en coches y espacios públicos. La evolución promete bases más pequeñas, menor generación de calor y la posibilidad de alimentar varios dispositivos a la vez.
La carga inalámbrica rápida y fiable parece que es posible según las innovaciones que trae el sector. Las compañías siguen apostando por un estándar que no parecía eficiente, pero si el Qi2 promete velocidades de 25W, ya hay que tomarse esto en serio.
