Científicos del CSIC desarrollan un perro guía robótico
Diseñan un perro-robot capaz de guiar a personas con discapacidad
No solo sirve para guiar a las personas con problemas visuales, sino que también es capaz de asistir a las personas mayores con problemas de demencia o Alzheimer
Los investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de Madrid gracias a la inteligencia artificial han creado un perro-robot dotado para guiar a personas dependientes o con alguna discapacidad. Una de las novedades de este instrumento es que puede distinguir con precisión y de forma inequívoca entre una persona o un objeto gracias a su sistema de aprendizaje automático y a una cámara que lleva incorporada en la cabeza. Además, cuenta con una conexión directa con Google, por lo que puede conocer las últimas horas del tráfico y comunicárselas al dueño mediante voz.
Los creadores se inspiraron en un perro guía, pero la realidad es que morfológicamente –por sus movimientos limitados y su material– se aleja bastante de la realidad. El robot creado con inteligencia artificial se llama «Tefi», que corresponde a las siglas del Instituto de Tecnologías Físicas y de la Información (ITEFI) del CSIC, departamento donde ha sido diseñado.
Tras el anuncio este 5 de diciembre, los creadores han aprovechado la oportunidad para comentar las ventajas de Tefi. Una de las más destacadas en la inclusión de un sistema GPS que permite navegar en la web y tener acceso a Google Maps para guiar al dueño hasta diferentes lugares.
Asimismo, los investigadores han incluido algoritmos de visión artificial que ayudan a su navegación y a la identificación de determinados objetos, como señales de tráfico, semáforos, calles, personas, sillas, mesas, ordenadores o información de códigos QR.
No solo sirve para guiar a las personas con problemas visuales, sino que también, gracias a su tecnología avanzada, es capaz de asistir a las personas mayores con problemas de demencia o Alzheimer.
«Además de avisar a su dueño de la hora a la que tiene una cita médica, Tefi es capaz de guiarle directamente hasta la consulta, sirviéndose únicamente de un plano del edificio que puede obtener si este es accesible; y gracias a su conexión a la red de telefonía móvil, el robot puede también solicitar un taxi para que el paciente no tenga que preocuparse por casi nada», ha explicado a Efe el investigador Gerardo Portilla, estudiante de doctorado en Robótica y «padre» de este perro robótico.
Hasta ahora, los investigadores han llevado a cabo distintas pruebas por el Instituto y han comprobado que el «perro» es capaz de guiar al usuario por las diferentes zonas del edificio utilizando solo comandos de voz. Según han comentado pronto se podrá probar en exteriores, donde el ambiente «es más dinámico».
«La aplicación que tiene este robot es sobre todo social, y eso es lo que lo diferencia del perro de la compañía estadounidense Boston Dynamics, que fue pensado con fines industriale; obviamente no sustituirá nunca a un animal, que aporta compañía y cariño, pero el abanico de posibilidades y aplicaciones es bastante amplio», ha manifestado Francisco Montero de Espinosa, investigador del CSIC en el mismo centro.
El modelo aún está en pruebas, por lo que a corto plazo los creadores e investigadores esperan poder implementar unos sensores que alerten de posibles problemas de salud de la persona que lo porta, como una presión arterial elevada o la presencia de agentes químicos volátiles en una vivienda.
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