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La llegada de ColónJohn Vanderlyn

Un estudio desmiente la leyenda negra de que Colón llevó una enfermedad similar a la sífilis a América

La treponematosis llevaba siglos infectando humanos antes de la llegada de los españoles al Nuevo Mundo

A lo largo de la historia, las conquistas entre pueblos han facilitado la introducción y expansión de diversas enfermedades. Son ejemplos conocidos la difusión de infecciones como la cólera, la tuberculosis o la viruela durante la colonización de Hawái por los ingleses, así como la de agentes similares en la conquista de América por los españoles.

Sin embargo, no todo lo que se atribuye a las expediciones de Cristóbal Colón es cierto, tal y como acaba de demostrar un estudio que descarta que la treponematosis, una enfermedad venérea similar a la sífilis, se expandiera por el continente tras haber sido llevada allí por sus conquistadores.

Análisis de ADN llevados a cabo en los restos óseos de cuatro personas fallecidas en la región costera de Santa Catarina, en Brasil, hace miles de años, han confirmado que esta enfermedad, que puede llegar a provocar lesiones desfigurantes e incapacitantes y deformidades en los huesos, los cartílagos y la piel, ya existía al menos dos milenios antes de que Colón desembarcara en el Nuevo Mundo.

Estos exámenes, realizados en huesos excavados en el yacimiento de Jabuticabeira II, descubrieron patógenos que mostraban signos de una enfermedad similar a la sífilis. En total, los investigadores examinaron 37 de 99 muestras de datos de secuenciación, y descubrieron que había entre siete y 133 resultados positivos para enfermedades derivadas de la familia Treponema, en la que se incluyen también el bejel, el pian y la pinta, que causan infecciones crónicas en la boca y la piel. Los investigadores estiman que los primeros casos de treponematosis en América tuvieron lugar entre el 780 a.C. y el 450 d.C.

«La recuperación de un genoma treponémico tan antiguo sugiere que pronto podremos llenar enormes vacíos en nuestra comprensión de la evolución y distribución de este patógeno en la Antigüedad a medida que se recupera más ADN de otros lugares del mundo», dijo Brenda Baker, antropóloga de la Universidad Estatal de Arizona que no participó en el proyecto, a WorldsSideKick.com.

Los investigadores, que publican su estudio en Nature, dijeron que estos hallazgos pueden arrojar luz sobre «cómo las poblaciones del pasado prosperaron y lidiaron con problemas de salud, lo que puede generar preocupaciones como la estigmatización debido a enfermedades o derechos y cuestiones legales entre las personas que viven hoy».