
María Patiño y Belén Esteban, junto a David Broncano en su visita a La Revuelta
Televisión
Profundo malestar dentro de RTVE ante el Sálvame que llega a La 1: «No es propio de la televisión pública»
Entre el indisimulado sesgo informativo de las mañanas a favor de Sánchez y el PSOE, con La Hora de La 1 como máximo exponente, y La Revuelta de David Broncano, el antídoto de la noche de TVE contra El Hormiguero por las críticas que se atreve a lanzar contra el Gobierno en sus tertulias, las tardes de La 1 se presentaban –por supuesto sin contar con las dos ediciones del Telediario al gusto del Gobierno– como una suerte de isla. Como un reducto, esta vez sí, más propio de una televisión pública: tres series (La Moderna, La Promesa y Valle Salvaje), un concurso cultural (El cazador) y un programa divulgativo como Aquí la Tierra.
Pero esa isla, en cuestión de semanas, también será ocupada por un desembarco nunca imaginado en una televisión pública nacional: un programa al estilo –valga la expresión– de Sálvame. En palabras de Sergio Calderón, el director de TVE fichado por el presidente de RTVE José Pablo López, «un contenedor diario en directo que aunará el entretenimiento y los temas de servicio público, abordado con mucho humor y sentido de la diversión». La definición del programa que llegará a las tardes de La 1 con rostros y productores del universo Sálvame la cerró con una frase a modo de intento de justificación: «y también con mucha responsabilidad de sentido de servicio público».
En RTVE existe un profundo malestar por la cercana llegada –más bien invasión–, de un formato al estilo de Sálvame a las tardes de La 1. El enfado alcanza a trabajadores de la casa, sindicatos y al Consejo de Informativos.
«No es propio de la televisión pública. RTVE no puede asumir un programa que no se ajusta a los parámetros de servicio público. La batalla de esta casa es la de la información y el entretenimiento, no la mesa camilla y Telecinco. Para eso están las televisiones privadas, no la pública», aseguran a El Debate fuentes de Prado del Rey.
«RTVE no puede asumir el polemismo de mesa camilla. Debería tener un programa más serio, menos frívolo, y resistir con un toque de distinción en este tipo de contenidos, como hace con el programa D Corazón», añaden esas mismas fuentes, que apuntan una motivación que va más allá de la audiencia: el beneficio económico para la productora del formato, La Osa Producciones Audiovisuales, la nueva entidad de Óscar Cornejo y Adrián Madrid, creadores de Sálvame, que sucede a La Fábrica de la Tele y Fabricantes Studio.
«Cuando fichas a personajes de Sálvame para sustentar una tarde con un programa como ese, estás rompiendo el Mandato-marco que vela por la función de la televisión pública», señalan desde el ente público voces preocupadas por el rumbo de TVE.