
Silvia Intxaurrondo ha conversado este martes con el ministro Óscar López en La Hora de La 1
Televisión
Intxaurrondo convierte su programa en TVE en un mitin contra el Supremo en defensa del fiscal
«Si ahora en un auto donde no se aportan pruebas pueden llevarnos a cualquiera de nosotros al banquillo, deberíamos empezar a preocuparnos», ha comentado la presentadora de La Hora de La 1
En la tarde del lunes, horas después de conocerse el procesamiento del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, el programa de Jesús Cintora en La 2, Malas Lenguas, se dedicó a intentar desacreditar al juez Hurtado por el auto que dictó. Este martes por la mañana, otro programa de TVE, La Hora de La 1, se ha entregado también a la defensa del fiscal general del Estado y del Gobierno atacando el auto del juez Hurtado. «Si ahora en un auto donde no se aportan pruebas pueden llevarnos a cualquiera de nosotros al banquillo, deberíamos empezar a preocuparnos», ha llegado a comentar Silvia Intxaurrondo.
«El fiscal general del Estado está a un paso de sentarse en el banquillo. El juez Hurtado lo ha procesado junto a la fiscal provincial de Madrid por la filtración de un correo del abogado de la pareja de Díaz Ayuso en el que reconoce dos delitos fiscales, Inma» (Inma Frigenti, experta de TVE en información sobre tribunales), planteaba de inicio Silvia Intxaurrondo.
No ha faltado, por supuesto, la entrevista suave de la presentadora de La Hora de La 1 al ministro de turno, en este caso, una vez más, Óscar López, ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública.
«Estábamos hablando de cómo el juez instructor señala en su auto directamente a la presidencia del Gobierno como parte de esa filtración y no aporta ningún tipo de pruebas. ¿A usted qué opinión le merece esa frase que aparece en el auto?», preguntaba la presentadora.
En su respuesta, Óscar López ha repetido en varias ocasiones la consigna de que el auto es «de aurora boreal». «Yo creo que el auto es de aurora boreal. No solamente no hay pruebas que permitan afirmar lo que afirma el auto. Hay pruebas que demuestran lo contrario que se han demostrado durante la instrucción de este proceso. Es de aurora boreal y desolador el mensaje que manda. Imagínese que cualquier delincuente piensa que denunciando a quien le está persiguiendo va a tener éxito. Es un auto como digo de aurora boreal», ha insistido por tercera vez el ministro.
«¿Entonces estamos ante un caso de lawfare? ¿Se está usando al poder judicial para desgastar políticamente al Gobierno, ministro?», ha preguntado Intxaurrondo.
«Voy a tener esta mañana la prudencia que no ha tenido el juez redactando ese juez. Son mensajes preocupantes los que se lanzan. El fiscal está persiguiendo un delito y otros están montando un caso para ir contra el que está persiguiendo el delito y no hay derecho y menos en un estado de derecho», respondía Óscar López.
«Pero usted ha dicho que se está montando una causa contra el fiscal general del Estado. ¿Quién está detrás de esa supuesta operación y con qué objetivo político?», inquiría Silvia Intxaurrondo.
«Me acuerdo tanto de Aznar… Cosas mías», lanzaba Óscar López antes de encontrarse con otras preguntas amables de la presentadora: «¿Usted considera que se está blanqueando al defraudador para criminalizar al que lo investiga?» o «¿Ustedes mantienen su confianza en el fiscal general del Estado?». «Absolutamente. Una persona íntegra que se dedica a perseguir el delito y que está sufriendo un desgaste precisamente por haber perseguido el delito y por haber sido ejemplar», ha contestado el ministro López.
Además de hablar con el magistrado Joaquim Bosch, Silvia Intxaurrondo ha conversado con José Antonio Martín Pallín, magistrado emérito del Tribunal Supremo.
«José Antonio, buenos días. ¿A ti qué te parece este auto del juez Hurtado en el que dice que presidencia del Gobierno indicó al fiscal general del Estado que tenía que filtrar ese correo pero para lo que no aporta ninguna prueba?».
«Me parece un auto absolutamente preocupante porque los autos se justifican por su redacción no porque el que lo redacta sea magistrado del Supremo o juez de Vitigudino. Hay que leerse los autos y saber si tienen una mínima consistencia jurídica y demuestran profesionalidad. Basta con leer las tres líneas y media del comienzo», ha señalado Martín Pallín.