Leonard Sánchez Pérez-Castejón Bernstein triunfa en el Real
El coliseo madrileño ha fichado al hermano músico del presidente, cuyo nombre artístico es David Azagra, después de que el Gobierno aumentara en 7 millones su aporte a la institución
David Sánchez Pérez-Castejón en 2018 durante la moción de censura que le dio la presidencia del Gobierno a su hermano
David Sánchez Pérez-Castejón, hermano de Pedro Sánchez Pérez-Castejón, presidente del Gobierno, es director de orquesta. Leonard Bernstein, un director de orquesta famoso, universal, fue nombrado director de la Filarmónica de Nueva York a los 25 años. Claro que Bernstein no cursó Económicas antes de irse a Rusia a cumplir su sueño. La oportunidad le llegó mientras era director asistente, apenas un adulto, cuando Bruno Walter, el director invitado, se puso enfermo.
A Paul McCartney, «de Liverpool», le llegó la oportunidad, según dijo George Harrison en directo, cuando le presentó delante de la realeza antes de cantar Till I Was you: con la música de Los Beatles enseñaba música Bernstein a sus alumnos. De una forma más prosaica y menos musical le llegó el momento a David Sánchez Pérez-Castejón, alias David Azagra. Poco se sabe de su periplo profesional petersburgués, donde se formó, salvo que fue director artístico del Teatro Mijáilovsky de la ciudad de los zares.
Azagra y Nacho Duato
En la bicentenaria escena rusa compuso un fragmento de percusión para la obra Nunc dimittis del compositor estonio Arvo Part sobre la que Nacho Duato (director de la compañía de ballet del Mijáilovski) elevó una de sus coreografías de estreno allá por 2011. Lo que se ha dicho en diversos lugares y momentos es que Azagra, «mi amigo» según Duato entonces, compuso la totalidad de la música en lugar de la realidad del fragmento de percusión.
Leonard Bernstein en los años 50
Demasiada confusión sobre el currículum profesional del lírico y socialista Azagra en Rusia. Pero se decía que a Bernstein le llegó la oportunidad siendo director asistente de la Filarmónica de Nueva York y a Sánchez-Castejón, de forma más prosaica y menos musical, le llegó de regreso a España en 2017 al entregársele la batuta, no de ninguna orquesta, sino de los conservatorios de música del Área de Cultura de la Diputación de Badajoz, en manos del PSOE, a razón de 45.000 al año. A partir de este momento cumbre, la carrera de David Sánchez Pérez- Castejón no ha dejado de crecer, imparable.
El genio oculto de la calle Comandante Zorita permanece a sueldo de la diputación, ya como jefe de artes escénicas
Como la de Bernstein, pero no del todo. El genio deslumbrante de Massachussets permaneció un cuarto de siglo al frente de la orquesta neoyorquina por su talento, y el genio oculto de la calle Comandante Zorita permanece a sueldo de la diputación, ya como jefe de artes escénicas de la cosa pacense, con emolumentos superiores, con un estreno operístico que costó 130.000 euros y recaudó 2.000 (del que el diario Hoy escribió: «El epicentro de la catástrofe estuvo en el foso, donde un incalificable director (al que en otro párrafo se calificaba de 'inútil y torpe'), sin noción alguna de los tiempi de la obra, hacía aspavientos a una orquesta amplificada que impedía oír a los cantantes»). Y todo ello desde su residencia en Portugal (impresionante teletrabajo musical) con el suyo. Con su talento se quiere decir.
Leonard Bernstein durante un ensayo en 1947
Porque hace falta tener talento para semejantes gestas, incluida la de ser nombrado director artístico del Mijáilovski. Bernstein pasó 25 años de leyenda y éxitos en su Filarmónica y Azagra lleva ya 7 de ocultación y fracasos en su diputación. Todo es ponerse llegar a los 25. Pero, mientras tanto, también ha sido fichado como miembro del comité asesor del Teatro Real, institución a la que su hermano ha aumentado la aportación gubernamental en 7 millones de euros.
El mito
El mito de Azagra se está formando. Nada de Filarmónica de Nueva York, ni de Viena, ni de Israel. Nada de West Side Story, ni de la sinfonía Jeremías, ni de la esplendorosa banda sonora de La ley del silencio de Elia Kazan, la única que compuso Bernstein en una vida que alcanzó todas las esquinas. Azagra no es el gran Leonard ni falta que hace. Solo le hace falta el hermano, el presidente filarmónico: todos los instrumentos en uno que necesita (y el único que parece servirle) después de tantos estudios rusos en esta España hoy más que nunca de charanga y pandereta.
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