Partidazo de Mateu y cía. Volvió a ganar España
Los estaban/estábamos esperando. «La tercera guerra mundial está al caer» fue una de las muchas ocurrencias que se leyeron tras conocer que habían sido elegidos para el Irán-Estados Unidos
Lo grité como un gol. O casi. Alargue del primer tiempo del Irán-Estados Unidos. Contragolpe yanqui, desmarque de Weah Jr., disparo, palo y gol. El 0-2. En menos tiempo de lo que se cuenta, el linier español señaló fuera de juego. ¡No habían llegado las imágenes al VAR y él estaba bandera arriba! Roberto Díaz Pérez del Palomar, vitoriano. Un asistente que no se refugia en los de arriba, esa cruz tantas veces. Uno de los de antes. Vista y al toro. Lo clavó. Fuera de juego. Justito. No para él.
Pareja de Pau Cebrián, valenciano. Como Mateu Lahoz. Lo bordaron. Y los estaban/estábamos esperando. Mateu, en el Irán-Estados Unidos, «la tercera guerra mundial está al caer» fue una de las muchas ocurrencias que se leyeron tras conocer que habían sido elegidos para este partido. Un 10 para ellos y me alegro. Nuestro arbitraje, a hombros. Volvió a ganar España. Me gusta dedicarles estas líneas.
Porque el resto del día, puaff. Un pim-pam inglés en dos minutos acabó con Gales, Rashford desatado. Bale no salió tras el descanso, lesionado... El Qatar-Holanda no fue un partido. Ecuador no se presentó. Gales es una broma. Estados Unidos se vengó de la derrota del 98. Irán defraudó.
Hablé con un amigo que vive en Teherán. La ciudad se llenó de gente. Por barrios, unos seguían el futbol y los otros gritaban, una vez más, contra los ayatolas. Un abrazo a Queiroz y sus jugadores. No dieron la talla futbolística. En la humana son gigantes. Mucha suerte.
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