El circuito femenino declara la guerra a Roland Garros y acusa de machista al torneo

Una vieja polémica, pero que año tras año va a más pese a que desde la organización dan las mismas respuestas que en ediciones anteriores. Roland Garros ha vuelto a ser acusado de machismo por su negativa a programar en el turno nocturno partidos femeninos y su directora, Amélie Mauresmo, rescata la misma réplica desde hace años: los encuentros masculinos son más largos.

Desde que en 2021 el Grand Slam de tierra batida estrenara su sesión nocturna para dar utilidad a la luz artificial que pusieron en todas las pistas, el debate sobre la ausencia de partidos femeninos en la sesión estrella de cada jornada ha ido en aumento. «Es una vergüenza», aseguró la tunecina Ons Jabeur, la tenista que más alto elevó la voz contra la decisión de vetar a las mujeres en el partido que, en teoría, más atención acarrea en el torneo.

En el punto de mira de la actual número 36 del mundo estaba la Federación Francesa de Tenis (FFT), organizadora del torneo, pero también la televisión de Amazon, que en Francia tiene los derechos de transmisión del encuentro nocturno. Es más, por toda la ciudad hay carteles promocionando le soir de tennis (la tarde de tenis) donde aparecen tenistas como Sabalenka o Gauff, además de Djokovic y Alcaraz. En cambio, a la hora de la verdad no hay mujeres en esa sesión.

Bien es cierto que Amazon, diseñador del cartel promocional, se lava las manos y aseguran que es la FFT quien elige el partido de la noche, mientras que Mauresmo echa balones fuera. «No es que las chicas no merezcan jugar por la noche, no es una cuestión de nivel. Pero hay que responder a ciertas exigencias», señaló la ex número uno del mundo.

En primer lugar, la duración de los partidos, a tres sets, es más corta y hay que pensar en los 15.000 espectadores que pagan una entrada para ver el encuentro. La solución podría ser la de otros Grand Slams, que ponen dos partidos en la sesión nocturna (Open de Australia y US Open). Mauresmo descartó imitar esta práctica porque genera demasiados problemas. Habría que comenzar antes, lo que puede provocar que las gradas estén vacías en el primer tramo, y acabarían más tarde, con bajas temperaturas en la primavera parisiense y sin una infraestructura de transporte públicos que garantice el retorno de los espectadores.

En todo caso, la exjugadora defendió el buen momento que atraviesa el tenis femenino, con la rivalidad entre Ayrna Sabalenka e Iga Swiatek, a quienes se unen las estadounidenses Coco Gauff y Madison Keys, ganadora del último Open de Australia.

Para Jabeur, el programa de esta edición tenía carteles más atractivos en el cuadro femenino que algunos de los que se programaron entre hombres. «Hemos visto un Badosa-Osaka, un partido increíble. Es una pena para el deporte femenino en general», dijo la tunecina. Aquel partido duró casi dos horas y media, algo más que el duelo entre Jannik Sinner y Arthur Rinderknech programado ese mismo día por la noche.

Pocos partidos femeninos

En cuatro años, solo cuatro partidos femeninos han superado la criba del turno de noche. Serena Williams-Begu y Swiatek-Kostyuk en 2021, Cornet-Ostapenko en 2022 y Sabalenka-Stephens en 2023. El año pasado desaparecieron del programa y nada hace indicar que, por ahora, vayan a volver.

Se había especulado con la opción de que se jugara un partido femenino el pasado sábado, cuando la sesión de noche de Roland Garros coincidió con la final de la Champions League que coronó al Paris Saint-Germain tras ganar por 5-0 al Inter de Milán, pero finalmente la organización optó por poner a Djokovic en ese turno. Además, hubiera sido un mensaje negativo también para el tenis femenino, pues se habría puesto un partido en ese horario cuando la audiencia iba a ser mínima.

Esa misiva de Ons Jabeur ha sacudido el circuito femenino, muy molesto en su mayoría con Roland Garros. De hecho, otras grandes tenistas como Jessica Pegula, 3 del mundo, han asegurado estar de acuerdo con las palabras de la tunecina. «Estoy muy de acuerdo con Ons, debería ser todo más justo. Somos un evento que se supone es igualitario, todos los Grand Slam lo son, ¿por qué no nos dan más oportunidades? Es como chocarse con una pared, llevamos hablando del mismo tema cuatro años, una eternidad, pero es que nunca ha habido igualdad», reflexionó la norteamericana.

También otra voz autorizada como la de Iga Swiatek, reina de la tierra batida parisina, habló sobre el tema: «Creo que debería ser igual porque los partidos de mujeres pueden ser entretenidos de la misma manera. Podemos ofrecer un buen espectáculo. Por eso creo que debería ser igual».

Sin embargo, Jannik Sinner número 1 del mundo en tenis masculino, no está de acuerdo con que el trato sea diferente. «Nosotros no hacemos el horario. Somos jugadores y no hacemos el calendario. Tenemos la misma cantidad de partidos masculinos y femeninos en las pistas grandes. Tenemos la misma cantidad de dinero en premios para hombres y mujeres. Yo no hago los horarios nocturnos, así que no puedo darte mi opinión», comentó en rueda de prensa.

Y es que la polémica, un año más, está servida y no parece que se vaya a encontrar una fácil solución. Roland Garros tiene un problema desde que decidió hacer la sesión nocturna y cada año el enfado del circuito femenino es mayor.