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27 de abril de 2024

La excanciller alemana, Angela Merkel, junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez

La excanciller alemana Angela Merkel, junto al presidente del Gobierno de España, Pedro SánchezGTRES

Análisis

Los diez años en los que Alemania ha terminado por barrer a España

España cuenta con unas finanzas cada día más débiles mientras Berlín está tomando medidas rápidas y concretas

Desde hace tiempo, tenía pendiente mirar qué está pasando con los países más importantes de Europa, comprobando qué ha pasado en los últimos 20 años pero, sobre todo, cómo han sido capaces de afrontar estos países las crisis del 2008 a 2012 y la del 2020.
Ya hemos visto que España se ha comportado bastante bien en el período de 20 años. Sin embargo, se nos han atragantado las crisis y las hemos solventado muy mal.
Hoy vamos a compararnos con el motor de Europa, Alemania, para ver qué es lo que nos sucede.
Simplemente con echar un vistazo al gráfico ya podemos observar que hasta el 2008 el crecimiento de las dos economías va completamente paralela, incluso con una pendiente mayor la economía española. En el 2009, las dos economías decrecen. Alemania lo hace un 4 % y España un 3,6 %, pero, a partir de ahí, la economía alemana vuelve a coger una senda de crecimiento hasta el 2020. Mientras que, España empieza a dar tropiezo tras tropiezo, en el 2010 y 2011 crece entre los dos años 0,4 %, y decrece en el 2012 y en el 2013.
El 2020, dramático para todo el mundo, las nefastas decisiones tomadas por el gobierno español, desde el confinamiento hasta la falta de medidas para reactivar la economía, hicieron que España sufriera la mayor caída de Europa, de la OCDE. El PIB se redujo hasta el 10,8 %. Mientras, Alemania lo hizo sólo al 3,4 %. En 2021 las dos economías crecieron un 7 %, con la diferencia de que el PIB alemán fue el más alto de su historia. Por contra, España se quedó a 40.000 millones del PIB del 2019.
Hay que tener en cuenta que estos datos del 2020 y 2021 son a precios de mercado y que España ha terminado con una inflación del 6,5 %. En cambio, Alemania lo ha hecho con una inflación del 3,1 %.
Otra forma de verlo es la siguiente:
En el año 2000, la economía alemana era un 226 % superior a la economía española. En esta década, Alemania sólo creció un 21,6 %, mientras que España lo hizo en un 65,6 % y eso permitió que la economía española se acercara a la germana y que esta sólo fuera un 139 % superior.
Pero al comparar la segunda década del siglo XXI, vemos de nuevo el importante problema que tiene España para afrontar las crisis.
Así vemos que Alemania fue capaz de crecer un 29,9 % en esta década, más que en la primera década del siglo, mientras que la economía española sólo fue capaz de hacerlo en un 4,6 %, agrandándose de nuevo las distancias y volviendo Alemania a tener un PIB tres veces superior al español.
Recordemos que la población española, a finales de 2020, era de 47,3 millones de habitantes, mientras que en Alemania había 83,2 millones. Es decir, la población alemana era superior en un 76 %.
La década pérdida en España fue una pena. La situación en la que el Gobierno socialista de Zapatero dejó a España fue tan lamentable que las medidas que Europa obligó a tomar a Rajoy produjeron caídas del PIB en 2012 y 2013, independientemente de los enormes errores que cometió Rajoy en esa época.
Hemos empezado una nueva década con una pandemia que, debido a la nefasta gestión socialista, nos llevó a decrecer como ninguna otra economía en Europa. El inicio de la salida de la crisis, de pronto, se ha visto afectada por una guerra en Ucrania y una inflación galopante que no hemos sabido (ni querido) parar en 2021. Los problemas actuales que tiene el Gobierno de Sánchez no tienen nada que ver con los problemas que tiene el Gobierno de Schölz. Siendo estos muchos, como tener que volver al carbón y a las nucleares para parar la filosofía «verde». Los alemanes los están afrontando con medidas rápidas y concretas.
Sánchez está noqueado por las circunstancias, por sus socios de Gobierno, que le tensan permanentemente la cuerda, por sus socios de legislatura, que cada día le exigen más, por un gasto público que no puede sostenerse y que sigue incrementándose (21.000 millones para igualdad). Además, tenemos unas finanzas cada día más débiles, que dentro de poco serán más caras, por un clima de tremenda desazón en las familias que ven cómo les sube el recibo de la luz, cómo llenar el depósito de la gasolina se hace cada día más difícil o cómo hacer la compra se ha vuelto insoportable para los salarios más bajos.
Las expectativas de crecimiento y de acercarnos a Alemania, no sólo han desaparecido, sino que todo indica que, cuando hagamos un próximo análisis, Alemania será más grande, no sé si más rica. Pero seguro que si no hacemos nada España será más pequeña y sin lugar a duda más pobre en comparación con los alemanes.
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