Margrethe Vestager, vicepresidenta de la Comisión Europea
'Excepción ibérica'
Bruselas autoriza el tope al precio del gas para abaratar la luz en España y Portugal
La Comisión Europea autoriza la excepción ibérica a través de un comunicado al que ha tenido acceso El Debate. La medida costará 6.300 millones a España y 2.100 millones a Portugal
Bruselas devuelve la autorización al tope del gas propuesto por España y Portugal. A través de una comunicación, a la que ha tenido acceso El Debate, la Comisión Europea da –al fin– el visto bueno a la excepción ibérica aprobada el pasado 13 de mayo en Consejo de Ministros extraordinario. Desde entonces, Madrid y Portugal llevan 26 días esperando el visto buen comunitario, que implica que el límite al precio del gas comienza a rodar.
«La medida está en consonancia con la Comunicación de la Comisión sobre seguridad del suministro y precios asequibles de la energía y las conclusiones del Consejo Europeo», afirma el comunicado que aclara que «la medida se aplicará hasta el 31 de mayo de 2023». La CE aclara que tendrá un coste total de 8.400 millones de euros, de los cuales 6.300 millones corresponderán a España y 2.100 millones, a Portugal.
El documento detalla que la compensación a las empresas de ciclo combinado se hará a través de una subvención directa. Además, aclara que durante los primeros seis meses de la aplicación de la medida, el precio tope real se fijará en 40 euros/MWh. A partir del séptimo mes, el precio tope aumentará en cinco euros al mes, resultando en un precio tope de 70 euros/MWh en el duodécimo mes.
El Ejecutivo comunitario aclara que la medida será financiada mediante los llamados «ingresos de congestión», a lo que se suma un cargo impuesto por España y Portugal a los compradores que se benefician de la medida. Es decir, aquellos consumidores a los que afecta el mercado mayorista diario.
El Gobierno rebajó las expectativas
Desde su planteamiento, la medida no ha dejado de añadir incógnitas al mercado energético. El Ejecutivo no ha dejado de rebajar las expectativas en torno al impacto que la norma tendrá sobre el recibo del consumidor. En un inicio, Moncloa aseguró que rebajaría la factura un 30 %; días después la propia ministra de Transición Energética redujo sus cálculos al 15 %.
Lo cierto es que el impacto real que la medida pueda tener sobre el consumidor ha generado dudas en el sector. Varios expertos han advertido de que el tope del gas podría incluso encarecer la factura de aquellos clientes que firmaron la renovación de su contrato fijo a partir del pasado 26 de abril. Según cálculos de Nera, sus recibos mensuales podrían subir hasta 19 euros.
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