Fundado en 1910

05 de mayo de 2024

Monedas y billetes de euro.

Monedas y billetes de euroEuropa Press

¿Estamos preparados para una crisis de deuda?

La caída del bono americano ha llevado los precios a niveles que no se veían desde 1980

El Consejo de Estabilidad Financiera del G20 advirtió hace unas semanas que el aumento de los tipos de interés y la incipiente crisis que se observa en las primeras economías del mundo podrían reducir la capacidad de los gobiernos de pagar la desproporcionada deuda que acumulan. Los síntomas de una crisis de deuda son cada vez más evidentes y los inversores deben estar preparados para lo que se avecina.
La deuda pública estadounidense ha superado este año los 33 billones de dólares y podría llegar a los 50 billones en 2033. En Europa, el endeudamiento amenaza con convertirse en un problema endémico con varios países por encima del 100 % de su IPC. Los gobiernos no dudan en emitir dinero o deuda ante la mínima señal de dificultad y la única duda es saber cuándo se perderá la confianza en los bonos.
La caída del bono americano ha llevado los precios a niveles que no se veían desde 1980. ¿Se trata de un síntoma negativo o una oportunidad? Según explica Víctor Alvargonzález, director de estrategia y socio fundador de la firma de asesoramiento independiente Nextep Finance, «la clave para saber si la burbuja de los bonos se está desinflando o, algo peor, si se está produciendo una pérdida de confianza en ellos está en los tipos de interés reales, que se miden por la diferencia entre el bono y la inflación».
Si bien la crisis de deuda no siempre avisa, cuando lo hace es con un debilitamiento de la divisa y el aumento de los tipos de interés de los bonos sin que aumente la inflación, como ocurrió con la crisis del euro.
«Los tipos están a un nivel elevado, comparable al de 2006, lo cual es una buena noticia para el inversor ya que significa que el bono es un activo seguro sin riesgo de impago. No obstante, si la inflación descendiera y los tipos de interés reales siguieran subiendo, podría ser el primer síntoma de la pérdida de confianza y la posterior crisis de deuda», añade
Por eso, este especialista en el diseño y seguimiento de carteras de fondos de inversión apunta a que, en caso de una crisis de deuda, es necesario encontrar los activos que no dependan de la confianza en los bancos centrales. Por ejemplo, durante la crisis financiera de 2008, activos como el oro, los bonos o el franco suizo aumentaron su valor; mientras que, en el caso de la burbuja de la Renta Fija de 2022, fueron las materias primas.
Víctor Alvargonzález, director de estrategia y socio fundador de Nextep Finance.

Víctor Alvargonzález, director de estrategia y socio fundador de Nextep Finance.Nacho Martín

Además de rodearse de asesores independientes, Alvargonzález recomienda contar una plataforma de inversión multiproducto que trabaje con un catálogo lo más amplio posible en el que elegir los productos adecuados.
«La crisis de deuda puede llegar mañana, dentro de un mes, dos años o no llegar nunca», comenta. «El endeudamiento genera crecimiento, aunque sea artificial, lo que se traduce en ingresos para las empresas, que se cristalizan en subidas en bolsa. Mientras las empresas ganen, se reflejará en sus cotizaciones, por lo que incluso podemos llegar a ver un rally alcista. En otras palabras, no hay problemas en invertir en bolsa y renta variable si los gobiernos siguen gastando mientras les funcione el truco de apagar todo con dinero».

Pacto de Estabilidad

Los altos tipos están elevando los costes de endeudamiento a cotas desconocidas. Alemania calcula que la financiación de la deuda le costará 40.000 millones de euros en 2023 por los 4.000 millones de 2022; en el caso de Italia, necesitará 100.000 millones el año que viene. El problema es que los responsables de Finanzas de la UE no se ponen de acuerdo.
Alemania ha presionado para presentar unas normas de presupuesto comunes para todos los países de la UE que conduzcan a una reducción de los intereses, mientras que Italia y Francia apuestan por planes individuales que no incluyan multas. En cualquier caso, si los ministros europeos no se ponen de acuerdo sobre las nuevas normas de endeudamiento, se volverá al antiguo Pacto de Estabilidad, mucho más estricto.
Comentarios
tracking