Para poder denunciar una violación es importante que las mujeres conozcan e interioricen una serie de recomendaciones
Tribunales
El Supremo anula una condena de 24 años por violación a un hombre tras admitir nuevas pruebas de ADN
La Sala de lo Penal ha admitido el recurso de revisión planteado por Ahmed Tommohui contra la sentencia dictada por la Audiencia de Barcelona en 1992
Inocente 30 años después. Así ha declarado la Sala Penal del Tribunal Supremo a Ahmed Tommouhi (Nador, 1951) un marroquí que hoy tiene 72 años y fue condenado por la Audiencia Provincial de Barcelona, el 23 de septiembre de 1992, a un total de 24 años entre rejas por dos delitos de violación y dos faltas de lesiones que ahora se sabe que él no cometió. El Alto Tribunal ha comunicado a las partes, este jueves, el fallo en el que admite íntegramente el recurso de revisión presentado por la defensa de Tommouhi contra la sentencia firme que le declaró, inicialmente, culpable, tras recibir nuevos elementos de prueba que exculpan al hombre de las conductas por las que se le había acusado.
Así las cosas, el Supremo ha hecho Justicia con el hombre que ha pasado 15 años privado de libertad, condenado por la agresión sexual sufrida por una niña de 14 años en Cornellá (Barcelona), en los años 90, que no cometió. Las declaraciones de la propia víctima, que varias décadas después ha reconocido haberse equivocado al identificarlo y unos informes periciales sobre el semen encontrado en una prenda íntima de la agredida, que no se correspondían con los marcadores biológicos del ADN del recurrente, han sido la clave de esta decisión.
No en vano, tal y como expuso el acusado en su recurso ante la Sala de lo Penal, dichos informes fueron realizados en 1992 por la Policía Científica de Barcelona, durante la investigación del caso ya que, aunque fueron una prueba presentada por su defensa durante el procedimiento judicial, nunca llegaron a ser puestos en conocimiento del Tribunal y, por lo tanto, éste no los tuvo en cuenta para pronunciarse.
¿El motivo? Que los peritos que confeccionaron y firmaron los mismos no acudieron a declarar en la vista oral para explicarlos y ratificarse en sus conclusiones y la Audiencia Provincial tampoco suspendió el juicio para su citación formal.
Una fatídica confusión
Nuria y G. amigas del instituto, se subieron al coche de dos hombres que, en una noche de fiesta, en 1991, se ofrecieron a llevarlas a Cornellá pero que, durante el trayecto, aprovecharon para violarlas. La Policía detuvo a Ahmed Tommouhi pero nunca encontró al otro autor de los hechos, y con estos mimbres la Audiencia Provincial de Barcelona, el 23 de septiembre de 1992, sentenció el destino del hombre que ahora ha quedado absuelto.
Los agentes encargados del caso analizaron varios restos de semen encontrados en la ropa interior que llevaba puesta la víctima y el acusado se prestó, en todo momento, de manera voluntaria a que cotejasen los mismos con varias muestras de ADN obtenidas de su sangre y saliva. Él era, sin duda, el máximo interesado en que se comprobase que los restos orgánicos hallados no se correspondían con su identidad.
Sin embargo, cooperar no le sirvió de mucho porque el tribunal de la Ciudad Condal decidió, en contra de la petición de la abogada de la defensa, que no era necesario suspender el juicio para que declarasen los peritos y explicasen el por qué Tommouhi no podía estar detrás de la terrible agresión sufrida por las dos chicas.
El reconocimiento y declaración de la joven bastó para que la Audiencia de Barcelona condenase: «Lo señalé sin ninguna duda y con todo mi odio», reconoció Nuria, la víctima, en 2022. Y es que la Policía mostró al hombre esposado delante de ella y de su amiga, antes de la rueda de reconocimiento que se montó para la identificación y la hoy mujer de 44 años creyó que era él. Tan sólo años más tarde fue consciente de su tremenda equivocación: «Fue muy doloroso pensar que había señalado a una persona que no había sido. Y realmente esperaba que la justicia hiciera algo».
Aunque el Supremo ha avanzado hoy a las partes el sentido de su decisión, el contenido íntegro de la misma no se hará público hasta dentro de unos días.
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