Intervención de la policía en el ataque a la sinagoga de Melilla
Manifestantes propalestinos asedian una sinagoga en Melilla al grito de «Israel, asesino»
El incidente finalizó sin heridos pese a la tensión generada por los concurrentes
La guerra desatada entre Israel y Palestina desde el pasado 7 de octubre está teniendo sus consecuencias en diferentes partes del mundo. En España, en la noche de este miércoles varios centenares de manifestantes propalestinos se concentraron frente a una sinagoga en Melilla con banderas palestinas, pitidos y al grito de 'Israel, asesino'.
Horas antes, en Túnez, otros manifestantes proHamás habían incendiado otra sinagoga. En España era la sinagoga Or Zaruah, situada en pleno centro de la ciudad melillense y en las horas en las que se produjo el incidente albergaba a fieles en su interior.
Pese a la tensión generada, la intervención policial hizo que el incidente no fuera a más y no se registraran heridos. Sin embargo, el asedio ha llevado a los agentes a iniciar una investigación policial para identificar a los responsables del ataque al templo religioso.
Las reacciones a lo sucedido en Melilla no han tardado en aparecer. El periodista y miembro de Vox en el Parlamento Europeo Hermann Tertsch no ha dudado en condenar el asedio y culpabilizar al Gobierno de Pedro Sánchez. «Todo lo que suceda en el ataque a la Sinagoga de Melilla es responsabilidad absoluta del gobierno de Sánchez y sus sicarios antisemitas y proterroristas. El gobierno de Sánchez es ya un peligro directo para la integridad física de los españoles y la seguridad común», ha señalado en la red social X.
Por su parte, el presidente de Melilla, Juan José Imbroda, quiso recordar en un mensaje urgente que «Melilla se ha distinguido, entre otras cosas, por ser un ejemplo de convivencia, de respeto, de solidaridad, de paz y libertad entre las culturas distintas que la conforman», dando «lecciones al mundo» de que las grandes religiones monoteístas pueden «vivir en paz y en cercanía». Así, hizo un llamamiento para que la «convivencia ejemplar» que tienen las diferentes culturas en la ciudad autónoma no se vea afectada por «conflictos exteriores, por muy dolorosos que sean».
Imbroda aprovechó su mensaje para pedir que Israel y Palestina alcancen una paz «justa y duradera», porque «la paz, para que sea duradera, tiene que ser justa».
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