Las graves actuaciones de Tsunami provocaron daños por valor de más de tres millones de euros
Audiencia Nacional
Las cifras del «terrorismo callejero» de Tsunami: tres policías heridos, dos aeropuertos colapsados y más de 1,8 millones en daños
Las «hostilidades» de los participantes en las acciones convocadas por la plataforma separatista sitúan, según la investigación judicial, la «violencia» al nivel de la kale borroka en el País Vasco
Tres policías nacionales resultaron heridos en los graves incidentes provocados por «sectores radicales violentos» del independentismo catalán, en las protestas organizadas en Barcelona contra la sentencia del procés en octubre de 2019. Los agentes, personados como víctimas del «terrorismo callejero» en la causa penal que se sigue en la Audiencia Nacional contra los convocantes de Tsunami Democràtic, objeto de los ataques perpetrados durante las acciones planeadas, entre otras, contra las dependencias de la Jefatura Superior de Policía Nacional ubicada en la Vía Laietana de la ciudad Condal.
Algunos de los manifestantes lanzaron «intensos ataques» contra los agentes, empleando un «estilo de terrorismo urbano o kale borroka» y usaldo «adoquines, piedras, bolas metálicas de petanca, bengalas, cócteles molotov, ácido y material metálico de bricolaje» con el «evidente»intento de producir el mayor número de bajas posibles” entre los funcionarios de las fuerzas de seguridad.
No fueron los únicos que sufrieron daños como resultado de los disturbios, de acuerdo con las cifras obrantes en el sumario judicial, al que ha tenido acceso El Debate, el «colapso» de los aeropuertos del Prat y Barajas y los altercados tras el clásico futbolístico entre el Real Madrid y el Barcelona, del 18 de diciembre de 2019, provocaron desperfectos y pérdidas por un valor total que supera los 1,8 millones de euros.
De las diligencias practicadas por el Juzgado de Instrucción Central número 6 de la Audiencia Nacional se desprenden los nada desdeñables costes de reparación, limpieza y mantenimiento de los desperfectos causados por los activistas de Tsunami en las protestas. También las cifras detrás de la parálisis de la actividad en dos aeropuertos internacionales durante horas, provocando también un severo «lucro cesante» a las compañías que no pudieron volar con normalidad y que se vieron obligadas a asumir los costes de realojar a sus pasajeros y tripulaciones.
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