La patrullera HS60 'Río Flumen' fue entregada el pasado mes de febrero
El día del suceso de Barbate
Las únicas patrulleras de la Guardia Civil capaces de competir con las narcolanchas estaban inoperativas
La 'Río Flumen' no podía desplazarse a Barbate a causa del temporal mientras que la 'Río Corneja' se encontraba a más de 150 kilómetros, en Huelva
La Guardia Civil ha recibido en el último años dos patrulleras de las que se decía que eran «las más veloces del mundo», la HS60 'Río Flumen' el pasado mes de febrero en Algeciras y la HS60 'Río Corneja', en septiembre en Huelva, ambas de la empresa española Aister.
Se trata de las dos únicas patrulleras de las que dispone la Guardia Civil capaces de competir en condiciones similares a las narcolanchas de los traficantes de droga ya que alcanzan velocidades cercanas a los 60 nudos gracias a sus dos motores de 1800 caballos de potencia y su casco de aluminio que, además de aligerar el peso, impide que reciba graves daños en caso de colisión con las narcolanchas. Esta ligereza, además, le permite hacer giros de 360º en muy poco espacio.
Son embarcaciones con 18 metros de eslora y 4,5 de manga por lo que, tanto por dimensiones, como por potencia y velocidad, triplican a la pequeña zodiac que el viernes 9 de febrero fue arrollada por los narcos.
Lanzagranadas incluido
Entre otras características que les permite enfrentarse de tú a tú las embarcaciones de los traficantes, destaca también el radar de navegación, un sistema de comunicación por satélite, un proyector de luz que supera el kilómetro de distancia y, lo más llamativo, un lanzagranadas automático de 40 milímetros.
Sin embargo, a pesar de todos los avances que suponen estas dos patrulleras respecto a las embarcaciones de los narcos, ninguna de las dos estaba disponible el pasado 9 de febrero.
La más cercana, la 'Río Flumen' que se encontraba en la Comandancia de Algeciras no podía salir debido al fuerte temporal que azotaba la zona aquel viernes.
La otra, la 'Río Corneja', que fue entregada a la Comandancia de Huelva, se encontraba a tal distancia, más de 150 kilómetros por mar, que, aunque hubiera podido capear el temporal, habría tardado demasiado tiempo en llegar.
De hecho, tal y como avanzó El Debate, ninguna de las patrulleras que la Guardia Civil tiene en Andalucía se encontraba operativa la fatídica noche del 9 de febrero. Ya que las que no estaban averiadas, no podían navegar en aquellas condiciones meteorológicas con fortísimos vientos y un mar muy picado.
No obstante, el Ministerio del Interior ha contratado la fabricación de otras seis patrulleras de este tipo. Las dos primeras llegarán los próximos meses de mayo y junio. La tercera el año que viene y las otras tres todavía no se ha cerrado el periodo de presentación de propuestas.
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